Los Acantilados del Infierno, situados en la costa norte de España, son una maravilla natural que impresiona por su belleza y verticalidad. Estas imponentes paredes rocosas, moldeadas por la fuerza del mar Cantábrico, ofrecen paisajes de ensueño para los amantes de la naturaleza, la fotografía y el senderismo. Si estás planeando una visita, aquí te contamos las mejores formas de disfrutar de este espectacular rincón asturiano.
Ubicados en la costa oriental de Asturias, dentro del municipio de Ribadesella, los Acantilados del Infierno forman parte de un paisaje costero agreste y salvaje. La zona es famosa por su geología única, donde el mar ha esculpido profundas hendiduras y formaciones rocosas que parecen desafiar la gravedad. Su nombre, tan evocador como impresionante, se debe a la fuerza con la que las olas chocan contra la roca, generando un estruendo sobrecogedor.
La manera más sencilla de llegar es en coche. Desde Ribadesella, se debe tomar la carretera AS-263 en dirección a Llanes. A pocos kilómetros, hay desvíos señalizados que conducen a los puntos de acceso para disfrutar de las vistas de los acantilados. También es posible llegar en bicicleta o a pie, aprovechando las rutas de senderismo que recorren la costa.
Existen varias maneras de admirar este paraje natural. Dependiendo de tus preferencias, puedes optar por rutas de senderismo, excursiones en barco o incluso explorar miradores accesibles en coche.
Una de las formas más gratificantes de descubrir los Acantilados del Infierno es caminando. Existen senderos bien señalizados que permiten recorrer la costa y detenerse en distintos puntos panorámicos.
Si prefieres evitar largas caminatas, existen varios miradores accesibles en coche desde donde se pueden obtener vistas impresionantes.
Una de las formas más emocionantes de descubrir este paisaje es desde el agua. Optar por una ruta en barco Acantilados del Infierno permite ver las paredes rocosas desde una perspectiva única, apreciando la majestuosidad del paisaje y la acción del mar sobre la piedra. Estas excursiones suelen partir desde Ribadesella y ofrecen una experiencia completa para quienes desean ver los acantilados desde otra perspectiva, con la posibilidad de avistar fauna marina en el trayecto.
Cada estación del año ofrece una experiencia distinta:
Los Acantilados del Infierno son una joya natural que merece la pena descubrir. Ya sea caminando por sus senderos, disfrutando de la vista desde un mirador o explorándolos desde el mar, este rincón asturiano ofrece un espectáculo visual incomparable. Si buscas una experiencia inolvidable en plena naturaleza, no dudes en planificar tu visita y maravillarte con este impresionante paisaje costero.
¿Dónde están los Acantilados del Infierno?
Ubicados en la costa oriental de Asturias, dentro del municipio de Ribadesella, los Acantilados del Infierno forman parte de un paisaje costero agreste y salvaje. La zona es famosa por su geología única, donde el mar ha esculpido profundas hendiduras y formaciones rocosas que parecen desafiar la gravedad. Su nombre, tan evocador como impresionante, se debe a la fuerza con la que las olas chocan contra la roca, generando un estruendo sobrecogedor.
¿Cómo llegar a los Acantilados del Infierno?
La manera más sencilla de llegar es en coche. Desde Ribadesella, se debe tomar la carretera AS-263 en dirección a Llanes. A pocos kilómetros, hay desvíos señalizados que conducen a los puntos de acceso para disfrutar de las vistas de los acantilados. También es posible llegar en bicicleta o a pie, aprovechando las rutas de senderismo que recorren la costa.
Las mejores formas de ver los Acantilados del Infierno
Existen varias maneras de admirar este paraje natural. Dependiendo de tus preferencias, puedes optar por rutas de senderismo, excursiones en barco o incluso explorar miradores accesibles en coche.
1. Senderismo: una experiencia inmersiva en la naturaleza
Una de las formas más gratificantes de descubrir los Acantilados del Infierno es caminando. Existen senderos bien señalizados que permiten recorrer la costa y detenerse en distintos puntos panorámicos.
- Ruta de los Bufones de Pría: Este sendero conecta los acantilados con los famosos bufones, cavidades en la roca por donde el agua del mar sale a presión, generando un espectáculo impresionante. Es una caminata de dificultad moderada, perfecta para quienes buscan combinar paisajes marinos con la fuerza natural del Cantábrico.
- Camino del Mirador del Infierno: Este es el mirador más emblemático para observar los acantilados en todo su esplendor. Desde aquí, la vista panorámica abarca un amplio tramo de la costa y permite apreciar la magnitud de la erosión marina.
- Ruta del Camín Encantáu: Aunque no se centra exclusivamente en los acantilados, esta ruta combina naturaleza y mitología asturiana, ofreciendo una perspectiva más cultural del entorno.
2. Miradores: vistas espectaculares sin esfuerzo
Si prefieres evitar largas caminatas, existen varios miradores accesibles en coche desde donde se pueden obtener vistas impresionantes.
- Mirador del Infierno: Ubicado en la parte alta de los acantilados, permite una visión completa del litoral y el mar Cantábrico.
- Mirador de Guadamía: Ofrece una panorámica espectacular del mar golpeando las formaciones rocosas.
- Mirador de los Bufones de Arenillas: Aunque su principal atractivo son los bufones, desde aquí también se pueden contemplar los acantilados en todo su esplendor.
3. Ruta en barco: una perspectiva diferente desde el mar
Una de las formas más emocionantes de descubrir este paisaje es desde el agua. Optar por una ruta en barco Acantilados del Infierno permite ver las paredes rocosas desde una perspectiva única, apreciando la majestuosidad del paisaje y la acción del mar sobre la piedra. Estas excursiones suelen partir desde Ribadesella y ofrecen una experiencia completa para quienes desean ver los acantilados desde otra perspectiva, con la posibilidad de avistar fauna marina en el trayecto.
Cuál es la mejor época para visitar los Acantilados del Infierno
Cada estación del año ofrece una experiencia distinta:
- Primavera y verano: Son los momentos ideales para disfrutar de caminatas bajo un clima agradable y aprovechar las excursiones en barco.
- Otoño e invierno: Aunque el tiempo puede ser más impredecible, la fuerza del mar en esta época crea un espectáculo impresionante con olas gigantes impactando contra la roca.
Consejos para la visita
- Lleva calzado adecuado: Si optas por hacer senderismo, es recomendable llevar zapatillas de trekking.
- Consulta el clima: El mar Cantábrico puede ser impredecible, por lo que es mejor revisar la previsión meteorológica antes de planear tu visita.
- Respeta el entorno: Se trata de un espacio natural protegido, por lo que es importante no dejar basura y respetar las indicaciones.
- Cámara o prismáticos: No olvides llevar una cámara para capturar las impresionantes vistas y unos prismáticos si te interesa la observación de aves.
Conclusión
Los Acantilados del Infierno son una joya natural que merece la pena descubrir. Ya sea caminando por sus senderos, disfrutando de la vista desde un mirador o explorándolos desde el mar, este rincón asturiano ofrece un espectáculo visual incomparable. Si buscas una experiencia inolvidable en plena naturaleza, no dudes en planificar tu visita y maravillarte con este impresionante paisaje costero.