Todos sueñan con ganar un jackpot, pero muy pocos entienden cómo funcionan estos populares títulos o son conscientes de que diferentes formatos de juego activan estos premios gigantes en ciertos momentos. Incluso cuando prueban suerte con operadores de casinos confiables, muchos aficionados están tan ansiosos por jugar que se olvidan de leer las reglas reveladas dentro del juego.
Para ayudar a los usuarios a entender de qué se tratan las versiones de jackpot, te traemos esta breve guía sobre los premios en línea más deseados.
Los jackpots progresivos son los que ofrecen los premios más grandes. El más famoso es la serie Mega Moolah, en la que el mayor pago fácilmente alcanza un par de millones. Cada vez que alguien realiza una apuesta, una pequeña fracción de ella se agrega al bote. Cualquier tragamonedas progresiva siempre tendrá varios niveles de premios asociados.
Dicho esto, no todos los jackpot son iguales:
Los casinos con jackpot colocan sus progresivos en un espacio destacado en el sitio web, ya que muchos usuarios parecen preferirlos sobre cualquier otro tipo de tragamonedas.
No todos los jackpots tienen la misma mecánica de juego, y el premio principal puede activarse de diferentes maneras. Los tipos más comunes son los aleatorios y los fijos, que se refieren al momento en que se libera el premio.
Con el bote aleatorio, no hay reglas específicas, y la gran recompensa puede caer en cualquier momento. Puede crecer todo el tiempo que sea necesario, y los jugadores pueden activarlo en cualquier punto. Muy a menudo, estos jackpots no tienen un límite mínimo o máximo.
En el tipo fijo, generalmente hay una cantidad ´must-drop´ (debe caer). Después de que el premio alcanza un cierto umbral, es solo cuestión de tiempo antes de que alguien gane el premio mayor.
Las versiones de jackpot en línea, al igual que todos los demás títulos en cualquier plataforma de iGaming, son impulsados por proveedores de software. El casino debe firmar un contrato con una compañía para agregar sus juegos a su interfaz. Por eso, es increíblemente importante que los usuarios elijan sitios seguros que trabajen solo con proveedores de primer nivel. De esta manera, pueden estar seguros de que la mecánica es justa y no hay intervención externa que irrumpa sus oportunidades.
Como siempre, recomendamos a nuestros lectores estar conscientes de que el entretenimiento en estas plataformas es solo para divertirse. Estar obsesionado únicamente con ganarte los botes mayores suele llevar a un comportamiento irresponsable y a un riesgo más alto. En última instancia, un jackpot es una adición única a la experiencia, pero lo que realmente cuenta es el disfrute general en el casino.
Para ayudar a los usuarios a entender de qué se tratan las versiones de jackpot, te traemos esta breve guía sobre los premios en línea más deseados.
Jackpots Progresivos: Ir a lo Grande o Irse a Casa
Los jackpots progresivos son los que ofrecen los premios más grandes. El más famoso es la serie Mega Moolah, en la que el mayor pago fácilmente alcanza un par de millones. Cada vez que alguien realiza una apuesta, una pequeña fracción de ella se agrega al bote. Cualquier tragamonedas progresiva siempre tendrá varios niveles de premios asociados.
Dicho esto, no todos los jackpot son iguales:
- Los botes globales son premios generados por todos los jugadores en cada casino que tenga ese título en particular, lo que hace que las recompensas sean más grandes que en cualquier otro título inspirado en jackpots. El mejor ejemplo de esto es Mega Moolah.
- Los clásicos son aquellos dónde solo cuentan las apuestas realizadas en ese casino en particular. Esto significa que el tamaño del premio mayor puede variar de un sitio web a otro. El mejor ejemplo de esto es Divine Fortune de NetEnt.
Los casinos con jackpot colocan sus progresivos en un espacio destacado en el sitio web, ya que muchos usuarios parecen preferirlos sobre cualquier otro tipo de tragamonedas.
Jackpots Aleatorios vs. Fijos
No todos los jackpots tienen la misma mecánica de juego, y el premio principal puede activarse de diferentes maneras. Los tipos más comunes son los aleatorios y los fijos, que se refieren al momento en que se libera el premio.
Con el bote aleatorio, no hay reglas específicas, y la gran recompensa puede caer en cualquier momento. Puede crecer todo el tiempo que sea necesario, y los jugadores pueden activarlo en cualquier punto. Muy a menudo, estos jackpots no tienen un límite mínimo o máximo.
En el tipo fijo, generalmente hay una cantidad ´must-drop´ (debe caer). Después de que el premio alcanza un cierto umbral, es solo cuestión de tiempo antes de que alguien gane el premio mayor.
Integrando el Sistema de Jackpot
Las versiones de jackpot en línea, al igual que todos los demás títulos en cualquier plataforma de iGaming, son impulsados por proveedores de software. El casino debe firmar un contrato con una compañía para agregar sus juegos a su interfaz. Por eso, es increíblemente importante que los usuarios elijan sitios seguros que trabajen solo con proveedores de primer nivel. De esta manera, pueden estar seguros de que la mecánica es justa y no hay intervención externa que irrumpa sus oportunidades.
Como siempre, recomendamos a nuestros lectores estar conscientes de que el entretenimiento en estas plataformas es solo para divertirse. Estar obsesionado únicamente con ganarte los botes mayores suele llevar a un comportamiento irresponsable y a un riesgo más alto. En última instancia, un jackpot es una adición única a la experiencia, pero lo que realmente cuenta es el disfrute general en el casino.
FOTOGRAFÍA: DEPOSITPHOTOS.COM
