El escultor e imaginero nazareno Antonio Luis Troya ha concluido su nueva imagen dolorosa, con la advocación de Nuestra Señora de los Dolores, para la Parroquia de Nuevo México, en Estados Unidos. Se trata de un nuevo encargo venido desde el continente americano, donde Troya cuenta con un gran prestigio.
En esta ocasión s ha tratado de una imagen realizada en tamaño natural, tallada en madera de cedro y policromada al óleo, con ojos de cristal, pestañas realizadas a mano con pelo natural y lágrimas con cristal fundido.
Según ha descrito el propio autor de esta imagen, muestra unos rasgos propios de la imaginería barroca andaluza, que pese al dolor por el hijo que humildemente se entregó al sacrificio por la rendición, no pierde el anhelo de su resurrección. Además, es una imagen de candelero, vestida por Antonio Bejarano. La corona y el corazón con siete puñales son de Orfebrería Castilleja.
En esta ocasión s ha tratado de una imagen realizada en tamaño natural, tallada en madera de cedro y policromada al óleo, con ojos de cristal, pestañas realizadas a mano con pelo natural y lágrimas con cristal fundido.
Según ha descrito el propio autor de esta imagen, muestra unos rasgos propios de la imaginería barroca andaluza, que pese al dolor por el hijo que humildemente se entregó al sacrificio por la rendición, no pierde el anhelo de su resurrección. Además, es una imagen de candelero, vestida por Antonio Bejarano. La corona y el corazón con siete puñales son de Orfebrería Castilleja.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL
FOTOGRAFÍA: JORGE CABRERA
FOTOGRAFÍA: JORGE CABRERA