La reacción de un grupo de ciudadanos ante la alerta creada por un robo en el interior de un supermercado situado en la Plaza de La Mina, en pleno centro de Dos Hermanas, impidió que el presunto autor pudiera emprender la huida, reteniéndolo hasta que agentes de la Policía Local se hicieron cargo del mismo.
El hecho ocurrió poco antes de las once y media de la mañana de este martes, cuando, tras ser descubierto por empleadas de dicho supermercado en el momento en el que este individuo, de unos 45 años, trataba de llevarse un juego de perfumes, y ante los gritos y la alarma que se creó, un grupo de hombres que se encontraban trabajando en la zona vieron a esta persona corriendo por la calle La Mina en dirección a la Plaza de la Constitución, consiguiendo detener su marcha y forzándolo a tirarse al suelo, reteniéndolo hasta que instantes después se personaron agentes de la Policía Local.
En este lugar se creó la lógica expectación, de personas que habían sido testigos de los hechos y de otras que acudieron ante las voces y la alarma despertada. Con posterioridad, agentes policiales, que se lo llevaron conducido, acabaron poniendo el libertad a esta persona tras conocerse que la dirección del supermercado no había llegado a presentar denuncia al haber recuperado los objetos que habían sido sustraídos.
Algunos testigos han declarado a este Diario Digital que ya un hombre intentó detener a esta persona instantes antes, sin lograrlo y dándose además un golpe muy fuerte contra el cristal de un escaparate, y que cuando se vio acorralado poco después arrojó un móvil al suelo, que podría haber sustraído con anterioridad.
El hecho ocurrió poco antes de las once y media de la mañana de este martes, cuando, tras ser descubierto por empleadas de dicho supermercado en el momento en el que este individuo, de unos 45 años, trataba de llevarse un juego de perfumes, y ante los gritos y la alarma que se creó, un grupo de hombres que se encontraban trabajando en la zona vieron a esta persona corriendo por la calle La Mina en dirección a la Plaza de la Constitución, consiguiendo detener su marcha y forzándolo a tirarse al suelo, reteniéndolo hasta que instantes después se personaron agentes de la Policía Local.
En este lugar se creó la lógica expectación, de personas que habían sido testigos de los hechos y de otras que acudieron ante las voces y la alarma despertada. Con posterioridad, agentes policiales, que se lo llevaron conducido, acabaron poniendo el libertad a esta persona tras conocerse que la dirección del supermercado no había llegado a presentar denuncia al haber recuperado los objetos que habían sido sustraídos.
Algunos testigos han declarado a este Diario Digital que ya un hombre intentó detener a esta persona instantes antes, sin lograrlo y dándose además un golpe muy fuerte contra el cristal de un escaparate, y que cuando se vio acorralado poco después arrojó un móvil al suelo, que podría haber sustraído con anterioridad.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL