Ya ha finalizado la
intervención de conservación y mantenimiento del monumento conmemorativo a la
Virgen de Valme. Con estos trabajos se ha ejecutado una limpieza del mismo,
aplicando las operaciones necesarias que beneficien su conservación y retarden
la aparición de nuevas manchas de origen biótico y ambiental, mediante la
limpieza, el tratamiento microbiocida y el tratamiento protector de la
superficie.
Estos trabajos han
consistido en una limpieza superficial, eliminando residuos sueltos, tierra fértil
en las uniones, plantas superiores, mediante el uso de brochas y aspiradora;
una limpieza mecánica, eliminando la suciedad incrustada, en su mayoría costras
negras biogénicas, generadas por suciedad ambiental y liquenización y limpieza
de las uniones de las placas que presentan material de rejuntado en mal estado,
suelto o en la actualidad con falta de funcionalidad, mediante el uso de
brochas, cepillos metálicos blandos, compresor, instrumental quirúrgico; una
limpieza por vía húmeda y química, para eliminar las manchas residuales de
carbonatación y productos de las escorrentías, impregnadas en el materia pétreo
calizo y en el mármol, mediante el uso de disoluciones neutras específicas y
papetas. Además, se ha aplicado un tratamiento biocida, se han recatado las
uniones abiertas (previa limpieza profunda de las mismas), se han colocado
tornillos en la placa orientada al este, aplicando protección antioxidante en
la tornillería y se ha ejecutado una hidrofugación general. Por último, se ha
realizado una modificación en el parterre que delimita la escalinata central
del monumento, para evitar que aparezcan en el futuro manchas en la misma
provocadas por los minerales de la tierra anteriormente existente.
Esta intervención,
promovida por el Ayuntamiento de Dos Hermanas, ha sido ejecutada por la empresa
nazarena Crest Arte, especializada en intervenciones de conservación,
mantenimiento y restauración. Esta empresa ha realizado importantes
intervenciones como las de la Cúpula de la Sacristía Mayor de la Catedral de
Sevilla, el Teatro Romano de Málaga, los Baños de María de Patilla y fuentes
históricas del Real Alcázar de Sevilla, los dólmenes de Menga y Soto o la
escalera de Capitanía General en la Plaza de España de Sevilla.
Este monumento, cuya
ejecución data de 1970, fue encargado a la empresa Vicente Coloma Llorens,
siendo la escultura de la Virgen obra de Andrés Álvarez Cobos. El diseño del
fue obra del aparejador municipal Pablo Gómez Gómez.
En el mismo, la Virgen
aparece sentada en una jamuga con el Niño sentado sobre su pierna izquierda,
ambos coronados. A la Virgen se le representa con el manto, los escudos reales
y las coronas que le había regalado el Ayuntamiento de Dos Hermanas en 1966. La
Virgen aparece alzada sobre un capitel sostenido por cuatro niños desnudos.
La escalinata está
realizada con placas mármol blanco pulido; el pedestal y pilar mediante placas
de caliza tallada, no pulida, parcialmente abujardada en las decoraciones de
hojas de palma de las molduras. La escultura se ejecutó mediante caliza
tallada, abujardados los ropajes y jamuga. En la parte inferior del monumento
existen cuatro placas conmemorativas, de mármol blanco. Tres de ellas tienen
inscripciones incisas, y la otra pulida y tallada a bajo relieve con el antiguo
escudo de Dos Hermanas. Todas las placas tienen clavos piramidales de bronce en
sus esquinas.