Dos Hermanas volvió a
vivir, tras dos años de ausencia debido a la pandemia del Covid-19, la
procesión de Santa Ana, Patrona de la localidad, por las calles más céntricas
de la ciudad. El intenso calor no fue impedimento para que la ciudadanía se
echara a la calle con el objetivo de festejar una festividad marcada en rojo en
el calendario de todos los nazarenos.
La Patrona estuvo
acompañada en un cortejo formado por las Hermandades de Penitencia y Gloria de
la localidad, además de una representación del Consejo de hermandades y
Cofradías, la Policía Local, Nacional y los miembros de la corporación
municipal del Ayuntamiento.
La parte musical corrió a
cargo de la Banda de Nuestro Padre Jesús de la Presentación al Pueblo, abriendo
la comitiva, y la Banda de Música de Dos hermanas Santa Ana, tras el paso de la
Patrona.
Uno de los momentos más
emotivos del recorrido, y principal novedad del mismo, fue el paso de por la
calle Divina Pastora, que amaneció totalmente engalanada para la ocasión y en
la que se sucedieron las “petalás” en toda la vía, además de el canto de una
sevillana al principio de la misma.
Por otra parte, la Velá de Santa Ana también vivió el paso del cortejo cuando ya volvía hasta la parroquia de Santa María Magdalena.