Hoy ha llegado un día muy importante para muchos nazarenos, el Domingo de Ramos, el día en el que se da el arranque oficial a la Semana Santa de Dos Hermanas, pero hoy, lamentablemente, no es el día que esperaban los cofrades debido al confinamiento que hace que tengamos que quedarnos en nuestras casas a causa de la crisis sanitaria que estamos viviendo en estos días.
Pero, en realidad, ¿qué es un verdadero Domingo de Ramos nazareno?
Un Domingo de Ramos es levantarse temprano y ponerse con sus mejores galas para ir a la iglesia por la mañana a Misa de Palmas, es saber que va a comenzar la semana más bonita del año, es ir a Santa María Magdalena y a la iglesia del Rocío a ver a las imágenes Titulares que van a procesionar por la tarde, es ver la alegría de los niños y el color que lucen las calles, es ver como el centro de la ciudad comienza a llenarse poco a poco porque sabe lo que va a llegar, es ver los balcones de la barriada del Rocío listos y esperando a su Cautivo y su Esperanza pasando por la calle.
Un Domingo de Ramos son esos nervios previos a la salida procesional esperando que todo salga bien y no haya ningún tipo de problema, son antifaces blancos, morados, rojos y verdes, es apreciar como un nazarenito con el antifaz levantado reparte caramelos a todo el mundo, es el olor a azahar que se entremezcla con el incienso que anuncia la llegada de los pasos, es ver avanzar a los pasos entre la multitud acompañados de los sones de sus bandas.
Un Domingo de Ramos es poder ver a Ntro. Padre Jesús en su Sagrada Entrada en Jerusalén y Ntra. Sra. de la Estrella en la plaza de La Mina, es acercarte al Callejón Cruz a ver cómo entra en el pueblo Ntro. Padre Jesús Cautivo y María Santísima de la Esperanza, es ver cómo se alejan los mantos rojo y verde de la Estrella y la Esperanza.
Un Domingo de Ramos son los besos y abrazos de los hermanos cuando terminan las estaciones de penitencia, es volver a casa con una “pechá” de andar, pero con una sonrisa en la cara porque esto, no ha hecho nada más que empezar.
Por todas estas razones hoy, en Dos Hermanas, es Domingo de Ramos… pero no es Domingo de Ramos, pero, aunque se vea aún un poco lejano, ya estamos esperando a que sea 28 de marzo de 2021, para poder volver a decir con fuerza e ilusión que de nuevo vuelve a ser Domingo de Ramos.
Pero, en realidad, ¿qué es un verdadero Domingo de Ramos nazareno?
Un Domingo de Ramos es levantarse temprano y ponerse con sus mejores galas para ir a la iglesia por la mañana a Misa de Palmas, es saber que va a comenzar la semana más bonita del año, es ir a Santa María Magdalena y a la iglesia del Rocío a ver a las imágenes Titulares que van a procesionar por la tarde, es ver la alegría de los niños y el color que lucen las calles, es ver como el centro de la ciudad comienza a llenarse poco a poco porque sabe lo que va a llegar, es ver los balcones de la barriada del Rocío listos y esperando a su Cautivo y su Esperanza pasando por la calle.
Un Domingo de Ramos son esos nervios previos a la salida procesional esperando que todo salga bien y no haya ningún tipo de problema, son antifaces blancos, morados, rojos y verdes, es apreciar como un nazarenito con el antifaz levantado reparte caramelos a todo el mundo, es el olor a azahar que se entremezcla con el incienso que anuncia la llegada de los pasos, es ver avanzar a los pasos entre la multitud acompañados de los sones de sus bandas.
Un Domingo de Ramos es poder ver a Ntro. Padre Jesús en su Sagrada Entrada en Jerusalén y Ntra. Sra. de la Estrella en la plaza de La Mina, es acercarte al Callejón Cruz a ver cómo entra en el pueblo Ntro. Padre Jesús Cautivo y María Santísima de la Esperanza, es ver cómo se alejan los mantos rojo y verde de la Estrella y la Esperanza.
Un Domingo de Ramos son los besos y abrazos de los hermanos cuando terminan las estaciones de penitencia, es volver a casa con una “pechá” de andar, pero con una sonrisa en la cara porque esto, no ha hecho nada más que empezar.
Por todas estas razones hoy, en Dos Hermanas, es Domingo de Ramos… pero no es Domingo de Ramos, pero, aunque se vea aún un poco lejano, ya estamos esperando a que sea 28 de marzo de 2021, para poder volver a decir con fuerza e ilusión que de nuevo vuelve a ser Domingo de Ramos.
CARLOS DÍAZ BEJARANO