Tras la alerta sanitaria y social que ha provocado la pandemia producida por el Covid-19, la Sociedad Española de Diabetes transmite un mensaje de tranquilidad, afirmando que la diabetes por sí misma no es un factor de riesgo para contraer el virus. Si hay que tener en cuenta, que cuando las personas que padecen esta patología desarrollan una infección viral, pueden darse dificultades a la hora del tratamiento a causa de una diabetes mal controlada o fluctuaciones de los niveles de glucosa en sangre.
Dificultad a la hora de tratar una infección viral a causa de la diabetes
Como se menciona con anterioridad la diabetes no es un factor de riesgo por sí mismo que aumente la probabilidad de infección por Coronavirus, aunque si se contrae el virus su gravedad y la evolución pueden ser diferentes con respecto a la población general. Aquí pueden influir la edad, el control de la diabetes o la presencia de otras patologías asociadas.
En estos casos el sistema inmunitario puede verse afectado, dificultando la tarea contra la lucha de la infección y aumentando el periodo de recuperación. A lo sumo, niveles altos de glucosa en sangre puede ser un medio de proliferación del virus.
Por ello es importante mantener un control estricto de la glucosa, aumentando los exámenes de los niveles y conocer bien los síntomas frecuentes producidos por una descompensación:
• Sed
• Ganas de orinar
• Falta de energía y concentración
• Aumento del apetito
• Sensación de hormigueo en manos y pies
• Visión borrosa
Y fundamentalmente, seguir los consejos sanitarios como el lavado de manos frecuente, mantener las distancias de 1,5 o 2 metros entre personas o utilizar el codo cuando se tose.
Recomendaciones nutricionales
El plan de alimentación debe ser individualizado, preferentemente bajo el control de un profesional de la nutrición. La planificación del menú resulta clave para mantener los excesos a raya y evitar las compras compulsivas.
Para mantener los niveles de glucosa estables es necesario basar la dieta en alimentos saludables y de hidratos de carbono de bajo índice glucémico (bajo 1-55, medio 56-69, alto 70 o superior). Frutas, hortalizas, lácteos o legumbres pueden ser un buen aliado para controlar los niveles de azúcar en sangre, sumado al consumo de fibra.
Asegura un correcto consumo de proteínas de alta calidad, evitando carnes rojas, embutidos y potenciando el consumo de proteínas de origen vegetal.
Reajuste nutricional de la ingesta a la situación de confinamiento, donde el gasto energético por lo general será menor. Evitando el consumo de alimentos muy calóricos, el picoteo entre horas o las ingestas excesivas.
Se recomienda mantener una buena higiene de los alimentos en la cocina, aunque estos no sean un medio de transmisión.
Aclarando que estas medidas no solo se deben realizar durante el periodo de cuarentena, sino que se deberían mantener de forma cotidiana para mantener un buen control de la diabetes y la salud.
Dificultad a la hora de tratar una infección viral a causa de la diabetes
Como se menciona con anterioridad la diabetes no es un factor de riesgo por sí mismo que aumente la probabilidad de infección por Coronavirus, aunque si se contrae el virus su gravedad y la evolución pueden ser diferentes con respecto a la población general. Aquí pueden influir la edad, el control de la diabetes o la presencia de otras patologías asociadas.
En estos casos el sistema inmunitario puede verse afectado, dificultando la tarea contra la lucha de la infección y aumentando el periodo de recuperación. A lo sumo, niveles altos de glucosa en sangre puede ser un medio de proliferación del virus.
Por ello es importante mantener un control estricto de la glucosa, aumentando los exámenes de los niveles y conocer bien los síntomas frecuentes producidos por una descompensación:
• Sed
• Ganas de orinar
• Falta de energía y concentración
• Aumento del apetito
• Sensación de hormigueo en manos y pies
• Visión borrosa
Y fundamentalmente, seguir los consejos sanitarios como el lavado de manos frecuente, mantener las distancias de 1,5 o 2 metros entre personas o utilizar el codo cuando se tose.
Recomendaciones nutricionales
El plan de alimentación debe ser individualizado, preferentemente bajo el control de un profesional de la nutrición. La planificación del menú resulta clave para mantener los excesos a raya y evitar las compras compulsivas.
Para mantener los niveles de glucosa estables es necesario basar la dieta en alimentos saludables y de hidratos de carbono de bajo índice glucémico (bajo 1-55, medio 56-69, alto 70 o superior). Frutas, hortalizas, lácteos o legumbres pueden ser un buen aliado para controlar los niveles de azúcar en sangre, sumado al consumo de fibra.
Asegura un correcto consumo de proteínas de alta calidad, evitando carnes rojas, embutidos y potenciando el consumo de proteínas de origen vegetal.
Reajuste nutricional de la ingesta a la situación de confinamiento, donde el gasto energético por lo general será menor. Evitando el consumo de alimentos muy calóricos, el picoteo entre horas o las ingestas excesivas.
Se recomienda mantener una buena higiene de los alimentos en la cocina, aunque estos no sean un medio de transmisión.
Aclarando que estas medidas no solo se deben realizar durante el periodo de cuarentena, sino que se deberían mantener de forma cotidiana para mantener un buen control de la diabetes y la salud.
VÍCTOR LINDE SIERRA
