La Delegada de Relaciones Humanas, Basilia Sanz Murillo, ha presidido esta mañana en el salón de Plenos del Ayuntamiento de Dos Hermanas el acto de clausura de los programas "Per Siras" y "Esperanza" que se han desarrollado con éxito durante el último año entre la población de la Zona Sur. Acompañada por las personas responsables y las técnicas de los respectivos programas, ha hecho entrega de los correspondientes diplomas de acreditación una vez superados los cursos. En total han sido 30 los diplomas entregados, 15 por cada programa.
El proyecto “Per Siras” comenzó su andadura en el año 2006 con el objetivo de conseguir la integración, formación y orientación de la mujer, con carácter integral (trabajo a nivel individual, familiar y comunitario), y donde prioritariamente se incluyan a mujeres con grandes carencias para hacer efectiva la integración y acceso a la formación y empleo. El perfil de las mujeres a las que va dirigido la formación es el siguiente:
1. Mujeres procedentes de unidades familiares con grandes carencias económicas (nuevo perfil de demandantes de prestaciones básicas, en riesgo de pobreza).
2. Mujeres con cualificación profesional, que pueden beneficiarse de prácticas becadas en la Zona Sur con los distintos perfiles de la población (jóvenes, mayores…) con el objetivo de ampliar o descubrir una nueva orientación a nivel laboral, (reinventarse ante la crisis).
Al efecto, los resultados y el impacto sobre la población destinataria han sido determinantes en los cambios y avances observados en la Zona Sur, destacando como novedad los cambios y mejoras en el propio territorio a partir de los trabajos constantes de mantenimiento, limpieza y rehabilitación desarrollados por estas alumnas, así como en las propias Unidades Familiares.
El programa “La Esperanza” comenzó su andadura en el año 2005 con el objetivo de conseguir la integración, formación y orientación de jóvenes en riesgo de exclusión social, con carácter integral, trabajando a nivel individual, familiar y comunitario, para hacer efectiva la integración y acceso a la formación y empleo. El perfil de jóvenes a los que va dirigido la formación es el siguiente:
1. Jóvenes procedentes de unidades familiares con grandes carencias económicas (nuevo perfil de demandantes de prestaciones básicas, en riesgo de pobreza)
2. Jóvenes procedentes de unidades familiares sin ingresos que estén cursando estudios medios/superiores, garantizándoles a través de la beca formativa los ingresos para que continúen con su formación.
Los resultados y el impacto sobre la población destinatarias han sido determinantes en los cambios y avances observados en la Zona Sur. La consolidación como Aula Permanente de Formación permite hoy garantizar el cumplimiento de los objetivos preestablecidos y recogidos en el proyecto, destacando como novedad los cambios y mejoras en el propio territorio a partir de los trabajos constantes de mantenimiento, limpieza y rehabilitación desarrollados por el alumnado así como, la atención a nuevos perfiles de unidades familiares en sus necesidades básicas y jóvenes como colectivo en formación permanente.
El proyecto “Per Siras” comenzó su andadura en el año 2006 con el objetivo de conseguir la integración, formación y orientación de la mujer, con carácter integral (trabajo a nivel individual, familiar y comunitario), y donde prioritariamente se incluyan a mujeres con grandes carencias para hacer efectiva la integración y acceso a la formación y empleo. El perfil de las mujeres a las que va dirigido la formación es el siguiente:
1. Mujeres procedentes de unidades familiares con grandes carencias económicas (nuevo perfil de demandantes de prestaciones básicas, en riesgo de pobreza).
2. Mujeres con cualificación profesional, que pueden beneficiarse de prácticas becadas en la Zona Sur con los distintos perfiles de la población (jóvenes, mayores…) con el objetivo de ampliar o descubrir una nueva orientación a nivel laboral, (reinventarse ante la crisis).
Al efecto, los resultados y el impacto sobre la población destinataria han sido determinantes en los cambios y avances observados en la Zona Sur, destacando como novedad los cambios y mejoras en el propio territorio a partir de los trabajos constantes de mantenimiento, limpieza y rehabilitación desarrollados por estas alumnas, así como en las propias Unidades Familiares.
El programa “La Esperanza” comenzó su andadura en el año 2005 con el objetivo de conseguir la integración, formación y orientación de jóvenes en riesgo de exclusión social, con carácter integral, trabajando a nivel individual, familiar y comunitario, para hacer efectiva la integración y acceso a la formación y empleo. El perfil de jóvenes a los que va dirigido la formación es el siguiente:
1. Jóvenes procedentes de unidades familiares con grandes carencias económicas (nuevo perfil de demandantes de prestaciones básicas, en riesgo de pobreza)
2. Jóvenes procedentes de unidades familiares sin ingresos que estén cursando estudios medios/superiores, garantizándoles a través de la beca formativa los ingresos para que continúen con su formación.
Los resultados y el impacto sobre la población destinatarias han sido determinantes en los cambios y avances observados en la Zona Sur. La consolidación como Aula Permanente de Formación permite hoy garantizar el cumplimiento de los objetivos preestablecidos y recogidos en el proyecto, destacando como novedad los cambios y mejoras en el propio territorio a partir de los trabajos constantes de mantenimiento, limpieza y rehabilitación desarrollados por el alumnado así como, la atención a nuevos perfiles de unidades familiares en sus necesidades básicas y jóvenes como colectivo en formación permanente.
REDACCIÓN / DHD DIGITAL
