El Ayuntamiento de Dos Hermanas va a solicitar a la Junta de Andalucía la reapertura del Hospital Vigil de Quiñones, conocido como antiguo Hospital Militar, que lleva trece años cerrado y que se encuentra en Sevilla frente a la barriada de Los Bermejales, según el acuerdo alcanzado por la mayoría del Pleno municipal nazareno de este mes de julio a propuesta de los grupos Sí Se Puede (SSP) e IULV-CA.
La moción conjunta de SSP e IULV-CA lo que hacía era sumarse a las últimas reivindicaciones de la Marea Blanca, que, además de pedir la reapertura del antiguo Hospital Militar, ha venido manifestándose desde meses atrás en contra de los recortes en sanidad y a favor de la mejora de los servicios sanitarios públicos.
En la moción se hacía referencia a la situación de las urgencias hospitalarias, destacándose cifras en relación con el déficit en el número de hospitales existentes en Andalucía, como así lo recoge el Informe Anual del Sistema Nacional de Salud de 2016, que dejaba a la Comunidad en la cola del país en cuanto al número de hospitales por habitante.
Frente a estas circunstancias, la moción consideraba paradójico que en este contexto un Hospital como el Militar de Sevilla se encuentre cerrado, "en situación de abandono y deterioro progresivo", además de haber sufrido el desmantelamiento de sus "valiosos equipamientos".
El Hospital Militar, por el que la Junta pagó en 2004 un total de seis millones de euros y que lleva 13 años cerrado, contaba con cinco quirófanos, 750 camas, helipuerto y las más novedosas tecnologías en 83.000 metros cuadrados de superficie. Y cuando se abra, se estima que volvería a funcionar con una unidad de Neurorehabilitación de lesiones medulares y daño cerebral, la primera en la comunidad, convirtiéndose en el centro de referencia para cirugía ambulatoria de Sevilla con hasta 30.000 intervenciones al año, además de tener prevista la incorporación de un centro de alta resolución, una comunidad terapéutica, el Centro de Salud de Los Bermejales, un hospital de día, una unidad de rehabilitación cardiaca y un área de hospitalización con 200 camas individuales.
"Frente a estas posibilidades y esas expectativas, el Hospital aparece hoy ante la ciudadanía como un monumento al despilfarro y a la ineficacia de la Junta de Andalucía, la cual hace caso omiso a la grave realidad sanitaria en la que estamos inmersos y no parece querer acometer esa recuperación de un hospital necesario para aliviar el colapso de los existentes en la provincia de Sevilla", recoge dicha moción, ante lo cual pedía que se instara a la Junta de Andalucía a que incluyera en sus próximos presupuestos las inversiones necesarias para que volviera a su uso asistencial hospitalario de acuerdo a las necesidades y demandas sanitarias de la población.
Esta propuesta contó con el apoyo de todos los grupos municipales, a excepción de Ciudadanos, que se abstuvo alegando que se trataba de una materia de competencia de la Junta de Andalucía y que debía, por tanto, aprobarse en el Parlamento, siendo calificado como "prioritario" por PP y SSP, mientras que el PSOE reveló que, según le transmitieron desde la Delegación de Salud en Sevilla, el hospital se abrirá en el momento en el que haya disponibilidad presupuestaria.
La moción conjunta de SSP e IULV-CA lo que hacía era sumarse a las últimas reivindicaciones de la Marea Blanca, que, además de pedir la reapertura del antiguo Hospital Militar, ha venido manifestándose desde meses atrás en contra de los recortes en sanidad y a favor de la mejora de los servicios sanitarios públicos.
En la moción se hacía referencia a la situación de las urgencias hospitalarias, destacándose cifras en relación con el déficit en el número de hospitales existentes en Andalucía, como así lo recoge el Informe Anual del Sistema Nacional de Salud de 2016, que dejaba a la Comunidad en la cola del país en cuanto al número de hospitales por habitante.
Frente a estas circunstancias, la moción consideraba paradójico que en este contexto un Hospital como el Militar de Sevilla se encuentre cerrado, "en situación de abandono y deterioro progresivo", además de haber sufrido el desmantelamiento de sus "valiosos equipamientos".
El Hospital Militar, por el que la Junta pagó en 2004 un total de seis millones de euros y que lleva 13 años cerrado, contaba con cinco quirófanos, 750 camas, helipuerto y las más novedosas tecnologías en 83.000 metros cuadrados de superficie. Y cuando se abra, se estima que volvería a funcionar con una unidad de Neurorehabilitación de lesiones medulares y daño cerebral, la primera en la comunidad, convirtiéndose en el centro de referencia para cirugía ambulatoria de Sevilla con hasta 30.000 intervenciones al año, además de tener prevista la incorporación de un centro de alta resolución, una comunidad terapéutica, el Centro de Salud de Los Bermejales, un hospital de día, una unidad de rehabilitación cardiaca y un área de hospitalización con 200 camas individuales.
"Frente a estas posibilidades y esas expectativas, el Hospital aparece hoy ante la ciudadanía como un monumento al despilfarro y a la ineficacia de la Junta de Andalucía, la cual hace caso omiso a la grave realidad sanitaria en la que estamos inmersos y no parece querer acometer esa recuperación de un hospital necesario para aliviar el colapso de los existentes en la provincia de Sevilla", recoge dicha moción, ante lo cual pedía que se instara a la Junta de Andalucía a que incluyera en sus próximos presupuestos las inversiones necesarias para que volviera a su uso asistencial hospitalario de acuerdo a las necesidades y demandas sanitarias de la población.
Esta propuesta contó con el apoyo de todos los grupos municipales, a excepción de Ciudadanos, que se abstuvo alegando que se trataba de una materia de competencia de la Junta de Andalucía y que debía, por tanto, aprobarse en el Parlamento, siendo calificado como "prioritario" por PP y SSP, mientras que el PSOE reveló que, según le transmitieron desde la Delegación de Salud en Sevilla, el hospital se abrirá en el momento en el que haya disponibilidad presupuestaria.
F. G. / REDACCIÓN