La 'Sevillana de Hierro', como es conocida la nazarena Ivana Benítez Rangel, logró el pasado domingo otra nueva hazaña, ya que concluyó en tercera posición en la exigente prueba celebrada en la ciudad italiana de Venecia, ya que se trataba de un Triatlon Internacional de Larga Distancia, en la que empleó algo más de catorce horas en completar.
La prueba, segunda de larga distancia internacional de la marcha Challenge celebrada entre Venecia y Mestre, parecía asequible por la horizontalidad del terreno, pero, sin embargo, se convirtió este año en un difícil reto para los deportistas que quisieron participar.
Pero de los 407 triatletas que se presentaron, 62 abandonaron la competición por la dificultad de las condiciones atmosféricas y ambientales. La corriente del mar adriático ralentizó los tiempos de la gran mayoría de los participantes en el cruce a nado desde Venecia a Mestre; el viento en contra hizo frustrante el recorrido de 180 km en bicicleta y la humedad de más del 80 por ciento perjudicó el desarrollo de la carrera de 42 km de la maratón.
A pesar de las inconveniencias, "los deportistas disfrutamos", como afirma la sevillana Ivana Benítez, "de un escenario inolvidable, ya que la salida de la prueba para realizar el nado de 3,8 km se realizó envuelta en una ópera cantada por Pavarotti".
Ivana Benítez Rangel, integrante del Club ADN de Dos Hermanas, ha alcanzado completar su quinta prueba de larga distancia y primera de Challenge, a pesar de sufrir varias lesiones previas a la competición. En esta ocasión ve reconocido su mérito con un tercer puesto en su categoría por edad y 24 de las féminas.
Esta atleta sevillana no teme a las distancias ni a las dificultades tras superar anteriormente el Ultraman (10k-360k-84k) celebrado en Sevilla en 2016, uno de los fines de semana más lluvioso del mes de noviembre, y cuatro largas distancias de la marca Ironman, entre ellas la fortísima de Lanzarote.
La prueba, segunda de larga distancia internacional de la marcha Challenge celebrada entre Venecia y Mestre, parecía asequible por la horizontalidad del terreno, pero, sin embargo, se convirtió este año en un difícil reto para los deportistas que quisieron participar.
Pero de los 407 triatletas que se presentaron, 62 abandonaron la competición por la dificultad de las condiciones atmosféricas y ambientales. La corriente del mar adriático ralentizó los tiempos de la gran mayoría de los participantes en el cruce a nado desde Venecia a Mestre; el viento en contra hizo frustrante el recorrido de 180 km en bicicleta y la humedad de más del 80 por ciento perjudicó el desarrollo de la carrera de 42 km de la maratón.
A pesar de las inconveniencias, "los deportistas disfrutamos", como afirma la sevillana Ivana Benítez, "de un escenario inolvidable, ya que la salida de la prueba para realizar el nado de 3,8 km se realizó envuelta en una ópera cantada por Pavarotti".
Ivana Benítez Rangel, integrante del Club ADN de Dos Hermanas, ha alcanzado completar su quinta prueba de larga distancia y primera de Challenge, a pesar de sufrir varias lesiones previas a la competición. En esta ocasión ve reconocido su mérito con un tercer puesto en su categoría por edad y 24 de las féminas.
Esta atleta sevillana no teme a las distancias ni a las dificultades tras superar anteriormente el Ultraman (10k-360k-84k) celebrado en Sevilla en 2016, uno de los fines de semana más lluvioso del mes de noviembre, y cuatro largas distancias de la marca Ironman, entre ellas la fortísima de Lanzarote.
DH DIARIO DIGITAL / REDACCIÓN
