Los vecinos de cuatro bloques de viviendas situadas en la esquina de las calles Marconi y Genil, en la barriada de Vistazul, se manifestaron de forma masiva en la noche de este martes, día 14 de marzo, para protestar contra la instalación de una antena de telefonía móvil de la empresa Orange en la azotea de uno de los bloques, hecho que, según denuncian, se ha hecho sin que se les informara en ningún momento.
Al grito unánime de 'No a la antena', una gran mayoría de los vecinos de la zona de Vistazul en la que se está instalando una antena de telefonía móvil se concentraron sobre las 20:00 horas ante el bloque en cuya azotea lo está acogiendo para trasladar a dicha comunidad de vecinos, que mantenía en ese momento una reunión, su rechazo a que se autorizada la instalación de este aparato y ante el temor de que pudiera afectar a la salud de las personas.
Y es que, como denunciaron anoche los vecinos y como viene recogido además en el acta de la Comunidad de propietarios con fecha 27 de septiembre de 2016 en la que se abordó la aprobación o no de dicha antena, su instalación ha suscitado la problemática sobre las consecuencias que podría acarrear a la salud de los vecinos del entorno, ya que, como se expuso en la reunión, son múltiples los estudios médicos y científicos que así lo podrían determinar, aunque también se aclaraba que ninguno de ellos eran concluyentes aún en este sentido.
El acuerdo firmado por la Comunidad de propietarios de dicho bloque, que en principio se fijaba por un período de diez años, contempla que por parte de la empresa Orange Espagne SAU se les abonará una contraprestación económica de 9.000 euros más IVA anuales, con los que la Comunidad pretendía llevar a cabo numerosas obras de mejora en el bloque, además de 2.500 euros para compensar el consumo de electricidad.
Durante la manifestación, los vecinos denunciaron además de que pese a que la Ley contempla que los acuerdos, para ser efectivos, deben contar con el respaldo de al menos el 60% de los propietarios, sólo diez de los 27 propietarios lo apoyaron, por lo que consideran que la autorización para la instalación de la antena no tiene validez.
En cualquier caso, los manifestantes disolvieron la protesta esperanzados, ya que una vez que concluyó la reunión de la Comunidad de propietarios del bloque que acoge la antena, mantuvieron un encuentro con ellos comunicándoles la decisión unánime de revocar el acuerdo y no permitir finalmente su instalación.
Al grito unánime de 'No a la antena', una gran mayoría de los vecinos de la zona de Vistazul en la que se está instalando una antena de telefonía móvil se concentraron sobre las 20:00 horas ante el bloque en cuya azotea lo está acogiendo para trasladar a dicha comunidad de vecinos, que mantenía en ese momento una reunión, su rechazo a que se autorizada la instalación de este aparato y ante el temor de que pudiera afectar a la salud de las personas.
Y es que, como denunciaron anoche los vecinos y como viene recogido además en el acta de la Comunidad de propietarios con fecha 27 de septiembre de 2016 en la que se abordó la aprobación o no de dicha antena, su instalación ha suscitado la problemática sobre las consecuencias que podría acarrear a la salud de los vecinos del entorno, ya que, como se expuso en la reunión, son múltiples los estudios médicos y científicos que así lo podrían determinar, aunque también se aclaraba que ninguno de ellos eran concluyentes aún en este sentido.
El acuerdo firmado por la Comunidad de propietarios de dicho bloque, que en principio se fijaba por un período de diez años, contempla que por parte de la empresa Orange Espagne SAU se les abonará una contraprestación económica de 9.000 euros más IVA anuales, con los que la Comunidad pretendía llevar a cabo numerosas obras de mejora en el bloque, además de 2.500 euros para compensar el consumo de electricidad.
Durante la manifestación, los vecinos denunciaron además de que pese a que la Ley contempla que los acuerdos, para ser efectivos, deben contar con el respaldo de al menos el 60% de los propietarios, sólo diez de los 27 propietarios lo apoyaron, por lo que consideran que la autorización para la instalación de la antena no tiene validez.
En cualquier caso, los manifestantes disolvieron la protesta esperanzados, ya que una vez que concluyó la reunión de la Comunidad de propietarios del bloque que acoge la antena, mantuvieron un encuentro con ellos comunicándoles la decisión unánime de revocar el acuerdo y no permitir finalmente su instalación.
F. G. / REDACCIÓN