Alberto Millán González Herce, arquitecto y autor del libro 'La Alquería. El Parque romántico de Dos Hermanas', que ha estudiado en profundidad tanto la historia de este espacio como su arquitectura, realizó este miércoles, durante la presentación de su libro en el Centro Cultural La Almona, una propuesta para que dicho Parque sea declarado Bien de Interés Cultural.
El acto que acogió este miércoles, día 7 de diciembre, La Almona sirvió para que se realizara un completo compendio de la larga y rica historia que atesora todo el espacio público que hoy es conocido como Parque de la Alquería del Pilar, pero en el que hasta el año 1985 estuvo viviendo una familia en su interior.
Y todo gracias a un joven arquitecto, nacido en Sevilla hace 37 años, pero que residió en Dos Hermanas con su familia desde que era un niño, ciudad en la que aún continúa y donde posee un estudio, y que ya con motivo del trabajo final de un máster comenzó a interesarse por un lugar al que había acudido en muchas ocasiones con sus padres para jugar y que siempre le llamó la atención.
De aquellas primeras investigaciones en torno, especialmente, a los edificios que se conservan en el interior del parque, pasó Alberto Millán González Herce a un estudio más profundo y detallado, adentrándose en su historia y, especialmente, en muchos de los personajes históricos que lo fueron conformando o dándole vida, como fueron los casos de José Lamarque de Novoa y su esposa Antonia Díaz, de Fernán Caballero o la familia Ybarra.
El libro 'La Alquería. El Parque romántico de Dos Hermanas' presentado este miércoles ha sido el ganador del II Concurso de Creación Literaria e Histórica que convocó en su segunda edición la Asociación Cultural La Plazoleta de Valme, editora de dicha publicación.
Sus últimos habitantes
En el acto de presentación estuvieron presentes dos de los fundadores de La Plazoleta de Valme, Rafael López Márquez y Álvaro Cueli Caro, el arquitecto municipal José María Boza, quien presentó al autor del libro, y una invitada especial, Mercedes Lazo, perteneciente a la familia Ramos Carretero, que fue la última que estuvo residiendo en el interior del Parque de la Alquería.
Esta familia se vio obligada a abandonar su vivienda en el año 1985 a raíz del proceso de expropiación que inició el Ayuntamiento de Dos Hermanas con el fin de dedicar el máximo espacio posible a parque público. Y Mercedes Lazo habló algo de este lugar: "El Parque ya está distinto a como yo lo viví, que era una maravillo, con esa frondosidad y esos árboles. Yo lo disfruté mucho junto con mis padres y hermanos. Entonces ya era muy costoso de mantener y sólo producía las naranjas que luego eran enviadas a Inglaterra. Mi familia, al perderla, le dolió, pero al menos mi madre está satisfecha de que Dos Hermanas pueda disfrutarlo".
La historia del parque
El libro de Alberto Millán recoge la historia de La Alquería, haciendo un recorrido muy ameno y divulgativo desde su creación y actual estado. Concretamente, conforman el parque municipal las huertas de Ybarra y la Alquería (propiedad de don José Lamarque y Antonia Díaz), que datan del siglo XIX.
Además, la obra realiza un completo estudio acerca del valor de los jardines y botánica que se encuentran en la Alquería, los cuales constituyen un hito en nuestra cultura, pues trasladan la idea europea de jardín romántico y pintoresco al modelo andaluz, de corte romántico, y anticipo del posterior movimiento regionalista. Unos méritos que, según este arquitecto, deben ser mantenidos, algo en lo que podría ayudar si el mismo fuera declarado, como considera que debería solicitarse, Bien de Interés Cultural.
El acto que acogió este miércoles, día 7 de diciembre, La Almona sirvió para que se realizara un completo compendio de la larga y rica historia que atesora todo el espacio público que hoy es conocido como Parque de la Alquería del Pilar, pero en el que hasta el año 1985 estuvo viviendo una familia en su interior.
Y todo gracias a un joven arquitecto, nacido en Sevilla hace 37 años, pero que residió en Dos Hermanas con su familia desde que era un niño, ciudad en la que aún continúa y donde posee un estudio, y que ya con motivo del trabajo final de un máster comenzó a interesarse por un lugar al que había acudido en muchas ocasiones con sus padres para jugar y que siempre le llamó la atención.
De aquellas primeras investigaciones en torno, especialmente, a los edificios que se conservan en el interior del parque, pasó Alberto Millán González Herce a un estudio más profundo y detallado, adentrándose en su historia y, especialmente, en muchos de los personajes históricos que lo fueron conformando o dándole vida, como fueron los casos de José Lamarque de Novoa y su esposa Antonia Díaz, de Fernán Caballero o la familia Ybarra.
El libro 'La Alquería. El Parque romántico de Dos Hermanas' presentado este miércoles ha sido el ganador del II Concurso de Creación Literaria e Histórica que convocó en su segunda edición la Asociación Cultural La Plazoleta de Valme, editora de dicha publicación.
Sus últimos habitantes
En el acto de presentación estuvieron presentes dos de los fundadores de La Plazoleta de Valme, Rafael López Márquez y Álvaro Cueli Caro, el arquitecto municipal José María Boza, quien presentó al autor del libro, y una invitada especial, Mercedes Lazo, perteneciente a la familia Ramos Carretero, que fue la última que estuvo residiendo en el interior del Parque de la Alquería.
Esta familia se vio obligada a abandonar su vivienda en el año 1985 a raíz del proceso de expropiación que inició el Ayuntamiento de Dos Hermanas con el fin de dedicar el máximo espacio posible a parque público. Y Mercedes Lazo habló algo de este lugar: "El Parque ya está distinto a como yo lo viví, que era una maravillo, con esa frondosidad y esos árboles. Yo lo disfruté mucho junto con mis padres y hermanos. Entonces ya era muy costoso de mantener y sólo producía las naranjas que luego eran enviadas a Inglaterra. Mi familia, al perderla, le dolió, pero al menos mi madre está satisfecha de que Dos Hermanas pueda disfrutarlo".
La historia del parque
El libro de Alberto Millán recoge la historia de La Alquería, haciendo un recorrido muy ameno y divulgativo desde su creación y actual estado. Concretamente, conforman el parque municipal las huertas de Ybarra y la Alquería (propiedad de don José Lamarque y Antonia Díaz), que datan del siglo XIX.
Además, la obra realiza un completo estudio acerca del valor de los jardines y botánica que se encuentran en la Alquería, los cuales constituyen un hito en nuestra cultura, pues trasladan la idea europea de jardín romántico y pintoresco al modelo andaluz, de corte romántico, y anticipo del posterior movimiento regionalista. Unos méritos que, según este arquitecto, deben ser mantenidos, algo en lo que podría ayudar si el mismo fuera declarado, como considera que debería solicitarse, Bien de Interés Cultural.
F. G. / REDACCIÓN