Los lectores de Dos Hermanas Diario Digital dirigen cada semana sus consultas al doctor Joaquín Fco. Domínguez Escobar, director médico del Hospital San Agustín, quien contesta dentro de la sección 'Tu médico responde'. En esta ocasión, las preguntas han girado, entre otras, en torno a los dolores en el vientre, a la aparición de llagas en la boca en los niños, a las actividades extraescolares o a los dolores en el brazo izquierdo.
– Llevo días en los que siento un dolor en la parte baja del vientre y se me va hacia el riñón. ¿Podría decirme de qué puede tratarse? Soy mujer y tengo 35 años.
-Buenas noches. Por los síntomas que usted describe, y tratándose de una mujer joven, debemos pensar principalmente en dos causas como probable origen del dolor: la urológica y la ginecológica. La sospecha principal es que puede estar sufriendo un cólico renal, causado bien por una piedra que obstruye parcial o totalmente las vías urinarias o bien por una infección del tracto urinario. Las infecciones urinarias ocasionan frecuentemente en las mujeres molestias dolorosas tal como las describe en su cuestión. Por otro lado, el origen del dolor puede ser ginecológico, relacionándose sobre todo con infecciones locales o roturas de quistes foliculares. Por último, no podemos dejar de pensar en un origen digestivo. Por todo ello, y para llegar a un diagnóstico aproximado, es necesario acudir al médico y practicar una exploración física y pruebas complementarias, entre las que deben estar un análisis de orina, una ecografía abdominal y urológica y una valoración por su especialista en Ginecología.
– Mi hija de 21 meses ha padecido un episodio de llagas en la boca muy intenso, incluso ha llegado a tener fiebre. No quería comer y le sangraban constantemente. ¿A qué puede deberse esto? Me comentó su pediatra que se trataba de una infección pero no me ha explicado mucho más. Lo hemos pasado muy mal durante una semana y me gustaría saber cómo puedo evitar que le vuelva a pasar.
-En los bebés es frecuente la aparición de llagas en la boca, cuyo origen se relaciona con una hipersensibilidad a las bacterias de la flora habitual de la boca del niño, o con una infección de la faringe, habitualmente causada por virus, o con un déficit de hierro, vitamina B12 o ácido fólico. Tal como describe el cuadro sufrido por su hija de 21 meses, ha debido tratarse de una infección vírica, lo que explica también la fiebre. Como tratamiento sólo se puede optar por una actitud terapéutica de alivio de los síntomas, administrando paracetamol para el dolor y la fiebre, además de aplicar una solución antiséptica a través de un pincel sobre las aftas. Para prevenir nuevas infecciones es aconsejable que la dieta de su hija sea muy variada para evitar carencias de vitaminas y minerales y una buena hidratación, que mantienen la mucosa oral en buen estado.
- Me estoy planteando cambiar de actividad extraescolar a mi hija de 9 años. Lleva dos años en natación y dice que se aburre. No le gusta hacer deporte pero creo que lo necesita para su desarrollo físico y mental y salir de la monotonía de la escuela y deberes. Dice que el patinaje le gusta: ¿recomendaría este deporte o insisto en mantenerla en natación? Y, en su opinión como médico me gustaría saber ¿qué deportes recomendaría para una niña de su edad? Me ayudaría para ofrecerle otras opciones.
-Lo más importante es que su hija mantenga una actividad deportiva periódica, sea la que sea, ya que está demostrado que consigue potenciar su salud física y mental. La práctica de un deporte de forma continuada consigue mantener un buen estado de forma física, aporta mayor resistencia y fortaleza y previene la obesidad. Además mejora la autoestima, permitiendo aprender a trabajar por objetivos y a potenciar la resistencia ante la frustración. Por último, le ayuda a socializarse (sobre en todo en deportes de equipo), enseñándole a cooperar en grupo para conseguir una meta común. En cuanto al tipo de deporte, aunque la natación es el deporte por excelencia, el patinaje le aportará a su hija el desarrollo del equilibrio y la coordinación de los movimientos, pero se trata de una actividad muy exigente. Mi consejo personal es que, si es posible, practique un deporte de equipo (baloncesto, fútbol, voleibol, balonmano, etc.), que evitará el aburrimiento al permitirle relacionare con otros niños y niñas de su edad.
– Soy mujer de 39 años. Llevo varios días con un dolor intenso en el brazo izquierdo, soy ambidiestra y muchas de las tareas físicas que desempeño las realizo con el brazo izquierdo. ¿Puede tratarse de una pequeña lesión o debería preocuparme más? Mi pareja dice que uno de los síntomas de infarto es un dolor fuerte en el brazo izquierdo. Me asusta bastante y me gustaría saber si debería acudir a mi médico por esta simple dolencia que, pienso, remitirá con el descanso del brazo.
-Para poder acercarnos a un diagnóstico más preciso, es necesario ser valorada por su médico. Él le debe realizar un cuestionario específico sobre el tipo de dolor (punzante-opresivo), forma de presentación (agudo-crónico), intensidad (fuerte-leve), además de preguntarle si se relaciona con el movimiento o no, y si se acompaña de otros síntomas generales. Si el dolor aumenta con la carga o el movimiento del brazo, mejora con el reposo y no se acompaña de otros síntomas, es muy probable que su origen sea osteomuscular. Si, por el contrario, el dolor aparece de forma brusca, es de tipo opresivo, se irradia hacia el centro del tórax o la mandíbula y se acompaña de sudoración, náuseas y gran malestar general, podríamos encontrarnos ante una cardiopatía isquémica. Además del cuestionario, su médico le practicará las pruebas y exploraciones oportunas, con lo que realizará un diagnóstico y le instaurará el tratamiento más adecuado.
– Mi hijo de 5 años aún no pronuncia la letra 'r'. Su profesor me comentó que, si antes de cumplir los 6 años no la pronunciaba, debería llevarlo a un logopeda. ¿Existe alguna forma de enseñarle desde su entorno a pronunciarla?, ¿a qué se debe esta anomalía? y, por último, ¿siempre tienen solución este tipo de problemas o existen casos que no lo consiguen superar? (he visto adultos que siguen sin poder pronunciarla…).
-La dislalia o alteración en la pronunciación consiste en un trastorno al articular algunos fonemas, como la 'r'. Es el trastorno del lenguaje más común en la etapa infantil. De hecho hablamos de dislalia evolutiva cuando se produce en el normal desarrollo del lenguaje, entre los 3 y 5 años de edad. A partir de los 4-5 años, si el trastorno permanece es necesario visitar al logopeda. El origen de la dislalia puede ser orgánico (patologías congénitas de las neuronas o del aparato fonador), audiógeno (por problemas de sordera) o funcional. Esta última es la más frecuente y se produce por un mal funcionamiento de los órganos articulatorios (ejemplo: no se sabe vibrar la lengua para pronunciar la 'r', reemplazándola por otra consonante como la 'd'). En el primer caso, las secuelas pueden ser permanentes. Si existe una hipoacusia del niño, la dislalia puede mejorar con la detección precoz de la sordera y la utilización de una prótesis auditiva. En la mayoría de los casos (dislalia funcional) se resuelve siempre que se hayan realizado sesiones continuadas con un logopeda.
- Mi padre tiene 65 años y siempre ha sido una persona muy tranquila y paciente. En los últimos meses y, coincidiendo con su jubilación, he notado un cambio en su carácter, está más irritable, discute mucho y tiene cada vez menos paciencia con todo. ¿Es normal que esto pase con su edad? Al principio, tanto mi madre como yo lo relacionábamos con su jubilación pero lo cierto es que es una persona muy activa y no ha dejado de hacer cosas, estudia, cuida a los nietos, etc, etc.
-Cuando una persona se jubila puede sufrir cambios psicológicos importantes, debido a la modificación que se produce principalmente en su motivación. Hay muchas personas que no asumen bien el cambio de rol y de responsabilidades de esta nueva fase de la vida. Si además se suman las alteraciones orgánicas y fisiológicas habituales del envejecimiento (artrosis, presbiacusia, presbicia, pérdida de memoria, etc.), el resultado puede ser un trastorno en la afectividad (de ansiedad, de depresión o de la personalidad). Los cambios sociológicos, como la jubilación, afectan a la persona en su área global (en relación a sí mismo, a su entorno familiar y de amistad y al entorno social). Se han realizado muchos estudios que advierten que la pérdida de actividad tras la jubilación puede llevar a un declive en las funciones cognitivas del individuo si no se mantiene activo en otros campos. En su caso, parece que su padre ha intentado reemplazar con otras actividades la pérdida de su actividad laboral, por lo que es cuestión de tiempo. Lo más relevante es que ocupe todo el tiempo libre que ahora tiene con actividades que le gusten y en las que se sienta útil y productivo.
El Hospital San Agustín (HSA) y Dos Hermanas Diario Digital han puesto en marcha la sección titulada 'Tu médico responde', a través de la cual los nazarenos y nazarenas pueden dirigirse de forma gratuita al doctor Domínguez para que este profesional resuelva sus dudas relacionadas con la salud.
Los lectores y seguidores de Dos Hermanas Diario Digital podrán hacer dicha consulta, sobre cualquier tema que les preocupe o interesa, dirigiéndose a la dirección de correo electrónico saludhdigital@gmail.com y, todas las semanas, saldrán publicadas las preguntas formuladas y las respuestas profesionales.
– Llevo días en los que siento un dolor en la parte baja del vientre y se me va hacia el riñón. ¿Podría decirme de qué puede tratarse? Soy mujer y tengo 35 años.
-Buenas noches. Por los síntomas que usted describe, y tratándose de una mujer joven, debemos pensar principalmente en dos causas como probable origen del dolor: la urológica y la ginecológica. La sospecha principal es que puede estar sufriendo un cólico renal, causado bien por una piedra que obstruye parcial o totalmente las vías urinarias o bien por una infección del tracto urinario. Las infecciones urinarias ocasionan frecuentemente en las mujeres molestias dolorosas tal como las describe en su cuestión. Por otro lado, el origen del dolor puede ser ginecológico, relacionándose sobre todo con infecciones locales o roturas de quistes foliculares. Por último, no podemos dejar de pensar en un origen digestivo. Por todo ello, y para llegar a un diagnóstico aproximado, es necesario acudir al médico y practicar una exploración física y pruebas complementarias, entre las que deben estar un análisis de orina, una ecografía abdominal y urológica y una valoración por su especialista en Ginecología.
– Mi hija de 21 meses ha padecido un episodio de llagas en la boca muy intenso, incluso ha llegado a tener fiebre. No quería comer y le sangraban constantemente. ¿A qué puede deberse esto? Me comentó su pediatra que se trataba de una infección pero no me ha explicado mucho más. Lo hemos pasado muy mal durante una semana y me gustaría saber cómo puedo evitar que le vuelva a pasar.
-En los bebés es frecuente la aparición de llagas en la boca, cuyo origen se relaciona con una hipersensibilidad a las bacterias de la flora habitual de la boca del niño, o con una infección de la faringe, habitualmente causada por virus, o con un déficit de hierro, vitamina B12 o ácido fólico. Tal como describe el cuadro sufrido por su hija de 21 meses, ha debido tratarse de una infección vírica, lo que explica también la fiebre. Como tratamiento sólo se puede optar por una actitud terapéutica de alivio de los síntomas, administrando paracetamol para el dolor y la fiebre, además de aplicar una solución antiséptica a través de un pincel sobre las aftas. Para prevenir nuevas infecciones es aconsejable que la dieta de su hija sea muy variada para evitar carencias de vitaminas y minerales y una buena hidratación, que mantienen la mucosa oral en buen estado.
- Me estoy planteando cambiar de actividad extraescolar a mi hija de 9 años. Lleva dos años en natación y dice que se aburre. No le gusta hacer deporte pero creo que lo necesita para su desarrollo físico y mental y salir de la monotonía de la escuela y deberes. Dice que el patinaje le gusta: ¿recomendaría este deporte o insisto en mantenerla en natación? Y, en su opinión como médico me gustaría saber ¿qué deportes recomendaría para una niña de su edad? Me ayudaría para ofrecerle otras opciones.
-Lo más importante es que su hija mantenga una actividad deportiva periódica, sea la que sea, ya que está demostrado que consigue potenciar su salud física y mental. La práctica de un deporte de forma continuada consigue mantener un buen estado de forma física, aporta mayor resistencia y fortaleza y previene la obesidad. Además mejora la autoestima, permitiendo aprender a trabajar por objetivos y a potenciar la resistencia ante la frustración. Por último, le ayuda a socializarse (sobre en todo en deportes de equipo), enseñándole a cooperar en grupo para conseguir una meta común. En cuanto al tipo de deporte, aunque la natación es el deporte por excelencia, el patinaje le aportará a su hija el desarrollo del equilibrio y la coordinación de los movimientos, pero se trata de una actividad muy exigente. Mi consejo personal es que, si es posible, practique un deporte de equipo (baloncesto, fútbol, voleibol, balonmano, etc.), que evitará el aburrimiento al permitirle relacionare con otros niños y niñas de su edad.
– Soy mujer de 39 años. Llevo varios días con un dolor intenso en el brazo izquierdo, soy ambidiestra y muchas de las tareas físicas que desempeño las realizo con el brazo izquierdo. ¿Puede tratarse de una pequeña lesión o debería preocuparme más? Mi pareja dice que uno de los síntomas de infarto es un dolor fuerte en el brazo izquierdo. Me asusta bastante y me gustaría saber si debería acudir a mi médico por esta simple dolencia que, pienso, remitirá con el descanso del brazo.
-Para poder acercarnos a un diagnóstico más preciso, es necesario ser valorada por su médico. Él le debe realizar un cuestionario específico sobre el tipo de dolor (punzante-opresivo), forma de presentación (agudo-crónico), intensidad (fuerte-leve), además de preguntarle si se relaciona con el movimiento o no, y si se acompaña de otros síntomas generales. Si el dolor aumenta con la carga o el movimiento del brazo, mejora con el reposo y no se acompaña de otros síntomas, es muy probable que su origen sea osteomuscular. Si, por el contrario, el dolor aparece de forma brusca, es de tipo opresivo, se irradia hacia el centro del tórax o la mandíbula y se acompaña de sudoración, náuseas y gran malestar general, podríamos encontrarnos ante una cardiopatía isquémica. Además del cuestionario, su médico le practicará las pruebas y exploraciones oportunas, con lo que realizará un diagnóstico y le instaurará el tratamiento más adecuado.
– Mi hijo de 5 años aún no pronuncia la letra 'r'. Su profesor me comentó que, si antes de cumplir los 6 años no la pronunciaba, debería llevarlo a un logopeda. ¿Existe alguna forma de enseñarle desde su entorno a pronunciarla?, ¿a qué se debe esta anomalía? y, por último, ¿siempre tienen solución este tipo de problemas o existen casos que no lo consiguen superar? (he visto adultos que siguen sin poder pronunciarla…).
-La dislalia o alteración en la pronunciación consiste en un trastorno al articular algunos fonemas, como la 'r'. Es el trastorno del lenguaje más común en la etapa infantil. De hecho hablamos de dislalia evolutiva cuando se produce en el normal desarrollo del lenguaje, entre los 3 y 5 años de edad. A partir de los 4-5 años, si el trastorno permanece es necesario visitar al logopeda. El origen de la dislalia puede ser orgánico (patologías congénitas de las neuronas o del aparato fonador), audiógeno (por problemas de sordera) o funcional. Esta última es la más frecuente y se produce por un mal funcionamiento de los órganos articulatorios (ejemplo: no se sabe vibrar la lengua para pronunciar la 'r', reemplazándola por otra consonante como la 'd'). En el primer caso, las secuelas pueden ser permanentes. Si existe una hipoacusia del niño, la dislalia puede mejorar con la detección precoz de la sordera y la utilización de una prótesis auditiva. En la mayoría de los casos (dislalia funcional) se resuelve siempre que se hayan realizado sesiones continuadas con un logopeda.
- Mi padre tiene 65 años y siempre ha sido una persona muy tranquila y paciente. En los últimos meses y, coincidiendo con su jubilación, he notado un cambio en su carácter, está más irritable, discute mucho y tiene cada vez menos paciencia con todo. ¿Es normal que esto pase con su edad? Al principio, tanto mi madre como yo lo relacionábamos con su jubilación pero lo cierto es que es una persona muy activa y no ha dejado de hacer cosas, estudia, cuida a los nietos, etc, etc.
-Cuando una persona se jubila puede sufrir cambios psicológicos importantes, debido a la modificación que se produce principalmente en su motivación. Hay muchas personas que no asumen bien el cambio de rol y de responsabilidades de esta nueva fase de la vida. Si además se suman las alteraciones orgánicas y fisiológicas habituales del envejecimiento (artrosis, presbiacusia, presbicia, pérdida de memoria, etc.), el resultado puede ser un trastorno en la afectividad (de ansiedad, de depresión o de la personalidad). Los cambios sociológicos, como la jubilación, afectan a la persona en su área global (en relación a sí mismo, a su entorno familiar y de amistad y al entorno social). Se han realizado muchos estudios que advierten que la pérdida de actividad tras la jubilación puede llevar a un declive en las funciones cognitivas del individuo si no se mantiene activo en otros campos. En su caso, parece que su padre ha intentado reemplazar con otras actividades la pérdida de su actividad laboral, por lo que es cuestión de tiempo. Lo más relevante es que ocupe todo el tiempo libre que ahora tiene con actividades que le gusten y en las que se sienta útil y productivo.
El Hospital San Agustín (HSA) y Dos Hermanas Diario Digital han puesto en marcha la sección titulada 'Tu médico responde', a través de la cual los nazarenos y nazarenas pueden dirigirse de forma gratuita al doctor Domínguez para que este profesional resuelva sus dudas relacionadas con la salud.
Los lectores y seguidores de Dos Hermanas Diario Digital podrán hacer dicha consulta, sobre cualquier tema que les preocupe o interesa, dirigiéndose a la dirección de correo electrónico saludhdigital@gmail.com y, todas las semanas, saldrán publicadas las preguntas formuladas y las respuestas profesionales.
DH DIARIO DIGITAL / REDACCIÓN