La entrada de la tienda 'La Casita de los Juguetes', situada en la calle San Francisco, esquina con la calle Canónigo, sufrió en la madrugada de este sábado un incendio, que afortunadamente pudo ser sofocado por los Bomberos antes de que se extendiera al interior de la misma. Por las características del siniestro, todo hace indicar que se ha podido tratar de un acto vandálico.
El hecho, según han informado a este Diario Digital los dependientes de este establecimiento, se pudo producir poco antes de las seis de la madrugada, y fueron unos empleados municipales, que se dirigían a su trabajo, los que se dieron cuenta del incendio que estaba afectando a la zona de la entrada y pudieron dar aviso a los Bomberos, que lo pudieron sofocar antes de que las llamas se extendieran al interior.
El origen del mismo pudo estar causado por unos cartones acumulados en esta zona, que hace como una pequeña esquina y situado además bajo una zona porticada, al que el autor o autores de este presunto acto vandálico prendieron fuego, posiblemente, como sospechan los propietarios de la tienda de juguetes, ayudados por algún líquido inflamable.
Pese a que la entrada del negocio apareció esta mañana completamente negra y los cristales -en este caso más gruesos de lo normal ya que con anterioridad este local había estado ocupado por un banco- rotos, el mismo pudo abrirse al público con normalidad.
El hecho, según han informado a este Diario Digital los dependientes de este establecimiento, se pudo producir poco antes de las seis de la madrugada, y fueron unos empleados municipales, que se dirigían a su trabajo, los que se dieron cuenta del incendio que estaba afectando a la zona de la entrada y pudieron dar aviso a los Bomberos, que lo pudieron sofocar antes de que las llamas se extendieran al interior.
El origen del mismo pudo estar causado por unos cartones acumulados en esta zona, que hace como una pequeña esquina y situado además bajo una zona porticada, al que el autor o autores de este presunto acto vandálico prendieron fuego, posiblemente, como sospechan los propietarios de la tienda de juguetes, ayudados por algún líquido inflamable.
Pese a que la entrada del negocio apareció esta mañana completamente negra y los cristales -en este caso más gruesos de lo normal ya que con anterioridad este local había estado ocupado por un banco- rotos, el mismo pudo abrirse al público con normalidad.
DH DIARIO DIGITAL / REDACCIÓN