Fue una estampa prácticamente inédita. Cientos de caballistas se apoderaron este domingo del Cortijo de Cuarto para hacer hermandad y para adelantar a todos que en la próxima Romería de Valme seguro que van a contar con un protagonismo especial, casi como antaño. Y es que se celebraba la I Marcha a Caballo al Real Santuario de Cuarto.
Pasadas las 08:30 horas de este domingo, día 20 de septiembre, unos 250 caballistas, más algunos coches de caballos, partieron desde el centro de Dos Hermanas en busca del Santuario de Cuarto, a donde el próximo 18 de octubre será llevada por los romeros la Virgen de Valme, cumpliendo con la tradición del tercer domingo de octubre.
La Hermandad de Valme está empeñada en conseguir que todo lo relacionado en torno a la Romería trascienda a lo habitual y se convierta en uno de los acontecimientos religioso-festivos más importantes de Andalucía. Y en ella era imprescindible incorporar a los caballistas, cuyo número había descendido en los últimos años de forma considerable.
De ahí que, en la búsqueda de un mayor realce de esta celebración, la nueva Junta de Gobierno, que encabeza Hugo Santos Gil, entendiera que había que incorporar a los caballistas, parte imprescindible de una Romería. Y bien que lo han conseguido. Tras partir éstos pasadas las 08:30 horas desde Dos Hermanas, después de asistir a la Santa Misa oficiada en la Parroquia de Santa María Magdalena, eligieron un camino que rodeaba la urbanización de La Motilla y que se dirigió, por una zona con un paseo muy agradable, hacia Fuente del Rey, para, desde allí, ir derechos hacia la Ermita.
A este lugar llegaron poco antes de las 12:30 horas y cuando ya se encontraba todo preparado para la celebración de la Santa Misa ante el espacio que acogerá próximamente a la Protectora de Dos Hermanas. Y, tras la misma, a descansar, y a disfrutar del buen tiempo, y a reponer fuerzas, porque sobre las 17:00 horas había que partir de nuevo hacia Dos Hermanas, siguiendo la misma ruta que a la ida.
La hora del regreso la marcará el ritmo al que los caballistas acudan, ya sin el rigor del tiempo, porque se trata precisamente de disfrutar y de volver a sentir las sensaciones de tiempos pasados, pero, si se cumplen las previsiones, ocurrirá en torno a las 20:30 horas. Sin duda, será el mejor preámbulo para una Romería que ya empieza a vivir de lleno Dos Hermanas.
Pasadas las 08:30 horas de este domingo, día 20 de septiembre, unos 250 caballistas, más algunos coches de caballos, partieron desde el centro de Dos Hermanas en busca del Santuario de Cuarto, a donde el próximo 18 de octubre será llevada por los romeros la Virgen de Valme, cumpliendo con la tradición del tercer domingo de octubre.
La Hermandad de Valme está empeñada en conseguir que todo lo relacionado en torno a la Romería trascienda a lo habitual y se convierta en uno de los acontecimientos religioso-festivos más importantes de Andalucía. Y en ella era imprescindible incorporar a los caballistas, cuyo número había descendido en los últimos años de forma considerable.
De ahí que, en la búsqueda de un mayor realce de esta celebración, la nueva Junta de Gobierno, que encabeza Hugo Santos Gil, entendiera que había que incorporar a los caballistas, parte imprescindible de una Romería. Y bien que lo han conseguido. Tras partir éstos pasadas las 08:30 horas desde Dos Hermanas, después de asistir a la Santa Misa oficiada en la Parroquia de Santa María Magdalena, eligieron un camino que rodeaba la urbanización de La Motilla y que se dirigió, por una zona con un paseo muy agradable, hacia Fuente del Rey, para, desde allí, ir derechos hacia la Ermita.
A este lugar llegaron poco antes de las 12:30 horas y cuando ya se encontraba todo preparado para la celebración de la Santa Misa ante el espacio que acogerá próximamente a la Protectora de Dos Hermanas. Y, tras la misma, a descansar, y a disfrutar del buen tiempo, y a reponer fuerzas, porque sobre las 17:00 horas había que partir de nuevo hacia Dos Hermanas, siguiendo la misma ruta que a la ida.
La hora del regreso la marcará el ritmo al que los caballistas acudan, ya sin el rigor del tiempo, porque se trata precisamente de disfrutar y de volver a sentir las sensaciones de tiempos pasados, pero, si se cumplen las previsiones, ocurrirá en torno a las 20:30 horas. Sin duda, será el mejor preámbulo para una Romería que ya empieza a vivir de lleno Dos Hermanas.
F. G. CH. / REDACCIÓN