Una mujer, cuyas nombre responde a las iniciales de A.F.S., de 37 años de edad y vecina de Dos Hermanas, ha sido detenida por la Policía Nacional como presunta autora de un presunto delito de estafa y blanqueo de capitales mediante el procedimiento del 'phsing', que consiste en simular el portal virtual de un banco y realizar envíos de dinero sin autorización.
La investigación, según ha informado este sábado el periódico 'El Norte de Castilla', se inició en la localidad de Burgos, después de que en la Comisaría Policía se presentara una denuncia por parte de una empresa de la citada capital.
Según ha informado la Policía Nacional, los ciberdelincuentes, utilizando procedimientos informáticos y técnicas de ingeniería social, habían conseguido acceder al ordenador personal de una empleada de la gerencia de una empresa son sede en Burgos, y mediante virus informáticos o malware simularon un portal virtual del banco con el que la empresa perjudicada trabaja habitualmente, obteniendo las credenciales bancarias de la víctima, y realizando acto seguido un envío de dinero fraudulento, sin su autorización, a una cuenta de una caja de ahorros de la localidad sevillana de Dos Hermanas.
De forma paralela a este proceso, los creadores de este malware, responsables de grupos criminales de carácter internacional, captan lo que se conoce como ‘mulas’ o intermediarios, que son las personas a cuya cuenta se transfiere el dinero que ha sido obtenido de forma ilegal.
Normalmente, este es un ciudadano español que, mediante un contrato previo, transfiere el dinero o activo financiero al estafador, quedándose con un pequeño porcentaje del dinero como pago por sus servicios. Habitualmente el intermediario es captado merced a engaños y promesas de contratos laborales que nunca llegan a producirse, informa 'el Norte de Castilla'.
La “mula”, una vez ha recibido el dinero, es requerida por los ciberdelincuentes para hacer el último estadio del proceso delictivo, el blanqueo del capital estafado. Tras realizar la disposición de dinero en efectivo, lo envía a través de empresas de servicios financieros que realizan transferencias internacionales a la persona previamente indicada, en este caso un ciudadano ucraniano con domicilio en Kiev, lo que impide normalmente que pueda ser rastreado una vez que retira el capital en el país de destino, pues no existe cuenta bancaria donde quede reflejada la transacción.
La Policía solicitó, desde Burgos, a la entidad bancaria andaluza el bloqueo de la cuenta y alertó a la Jefatura Superior de Policía de Sevilla ante la posibilidad de que la 'mula' acudiera a retirar el dinero. A los pocos minutos, la mujer fue detenida cuando acudió a una sucursal para sacar el dinero.
La investigación, según ha informado este sábado el periódico 'El Norte de Castilla', se inició en la localidad de Burgos, después de que en la Comisaría Policía se presentara una denuncia por parte de una empresa de la citada capital.
Según ha informado la Policía Nacional, los ciberdelincuentes, utilizando procedimientos informáticos y técnicas de ingeniería social, habían conseguido acceder al ordenador personal de una empleada de la gerencia de una empresa son sede en Burgos, y mediante virus informáticos o malware simularon un portal virtual del banco con el que la empresa perjudicada trabaja habitualmente, obteniendo las credenciales bancarias de la víctima, y realizando acto seguido un envío de dinero fraudulento, sin su autorización, a una cuenta de una caja de ahorros de la localidad sevillana de Dos Hermanas.
De forma paralela a este proceso, los creadores de este malware, responsables de grupos criminales de carácter internacional, captan lo que se conoce como ‘mulas’ o intermediarios, que son las personas a cuya cuenta se transfiere el dinero que ha sido obtenido de forma ilegal.
Normalmente, este es un ciudadano español que, mediante un contrato previo, transfiere el dinero o activo financiero al estafador, quedándose con un pequeño porcentaje del dinero como pago por sus servicios. Habitualmente el intermediario es captado merced a engaños y promesas de contratos laborales que nunca llegan a producirse, informa 'el Norte de Castilla'.
La “mula”, una vez ha recibido el dinero, es requerida por los ciberdelincuentes para hacer el último estadio del proceso delictivo, el blanqueo del capital estafado. Tras realizar la disposición de dinero en efectivo, lo envía a través de empresas de servicios financieros que realizan transferencias internacionales a la persona previamente indicada, en este caso un ciudadano ucraniano con domicilio en Kiev, lo que impide normalmente que pueda ser rastreado una vez que retira el capital en el país de destino, pues no existe cuenta bancaria donde quede reflejada la transacción.
La Policía solicitó, desde Burgos, a la entidad bancaria andaluza el bloqueo de la cuenta y alertó a la Jefatura Superior de Policía de Sevilla ante la posibilidad de que la 'mula' acudiera a retirar el dinero. A los pocos minutos, la mujer fue detenida cuando acudió a una sucursal para sacar el dinero.
DH DIARIO DIGITAL / REDACCIÓN