CONVERSACIONES NAZARENAS. Alfonso San José González, de 26 años de edad, recibió el pasado mes de junio, de manos del Rey Felipe VI, el Premio Universitario 'Real Maestranza de Caballería de Sevilla' al haber obtenido el mejor expediente académico, con una nota media de 9,45. En esta entrevista comenta algunas de sus inquietudes y proyectos de futuro.
Alfonso San José es licenciado en Magisterio por inglés y recientemente ha concluido sus estudios en la Facultad de Bellas Artes de Sevilla, formación que completa en estos momentos con un máster en Idea y Producción. Este mismo centro universitario ya le otorgó el pasado año la Medalla de la Facultad de Bellas Artes por su sobresaliente expediente académico.
- ¿Siempre has sido buen estudiante?
- Digamos que se me han dado bien los estudios. Por Magisterio pasé un poco más de puntillas, pero ya en Bellas Artes ya se juntó todo: me gusta, se me da bien y le pones empeño.
- ¿Cuándo decidiste orientar tu vida hacia el estudio de las Bellas Artes?
- Se trata de algo que siempre lo he tenido ahí en el horizonte, lo que ocurre es que lo decidí ya en el momento en el que acabé Magisterio, que lo estudié un poco por tradición familiar.
- ¿Y cuáles eran las inquietudes que te llevaron a ello?
- El arte es el vehículo a través del cual yo me expreso, y sentía que Bellas Artes era el contexto. Para ser artista no hay que estudiar Bellas Artes, pero sí que hay un contexto, una serie de personas, artistas, alumnos, que se reúnen en la Facultad y se crea un ambiente especial.
- ¿Antes de matricularte en Bellas Artes habías realizado algunas obras por tu cuenta?
- Claro, lo hacía por libre, pero eran desperdigadas.
- ¿Qué tipo de cosas?
- Aquellas que me llamaban la atención. Las copiaba, las dibujaba y las representaba, pero, claro, es una etapa que se va quemando y llega el momento en el que necesitas de otras fuentes.
- ¿Y qué tienes pensado hacer una vez que concluya el máster?
- El doctorado. Es lo que tengo en el horizonte más cercano. Para ello, el trabajo de fin de máster me está sirviendo como semilla de lo que va a ser la futura tesis.
- ¿En qué has centrado el trabajo de fin de máster?
- Sobre la forma tridimensional. A mí me gusta mucho la escultura y el dibujo, y entonces estoy trabajando en cómo lo tridimensional, al fragmentarse, pierde unicidad, y eso me lleva, por ejemplo, a la frontera, que es una división muy artificial.
- Y una vez que concluya el doctorado, ¿te gustaría dedicarte a la enseñanza?
- Me gustaría, lo que ocurre es que cuando acabe el doctorado creo que voy a tener que volar, que será un punto de no retorno, porque en la Facultad de Bellas Artes hay muy pocas perspectivas.
- Volar, ¿a dónde?
- Creo que a Estados Unidos.
- ¿Crees que allí hay mayores posibilidades?
- Creo que sí. Y con mi formación, creo que también. Es que a mí me puede venir bien. En principio, podría irme con una beca de profesor de español y, una vez allí, indagar e ver el movimiento artístico que hay.
- ¿Qué irías a Nueva York?
- Prefiero alguna zona más hispana, como San Francisco o Miami.
- ¿No te da miedo irte de Dos Hermanas?
- Hombre, me da un poco de vértigo, porque a mí me gustaría desarrollarme aquí, la verdad, pero estoy viendo que se me está cerrando el campo.
- Durante este tiempo, ¿has tenido en Dos Hermanas algún tipo de contacto con alguna escuela, colectivo o corriente artística?
- No. Es que tampoco he visto aquí mucho movimiento. Está Ventana Plástica, pero vi que son más bien aficionados. Pero tampoco me he movido mucho en Sevilla, sino que estoy muy metido en la Facultad.
- ¿Has llegado a participar en la Muestra al Aire Libre que convoca Ventana Plástica?
- Sí, he participado en alguna ocasión, pero lo hice cuando estudiaba Magisterio. Me dieron algún premio, pero ya lo agoté un poco.
- ¿Tienes algún maestro o corriente artística que te atraiga especialmente o que te inspires en ella?
- Hay muchos artistas que me encantan, como, por ejemplo, Velázquez, pero yo no pinto; entonces, para mí es un referente y cojo muchas cosas de él y de otros artistas, porque nadie crea de la nada. Todo el mundo coge sus ingredientes y luego prepara su receta.
- ¿Has montado alguna vez una exposición o mostrado tu obra en algún lugar?
- Sí, he participado en algunas exposiciones, pero cuando llegué a tercero de carrera paré, porque lo que estaba haciendo era mostrar algunas obras desperdigadas, trabajos de clase... Entonces, paré, decidí apartarme y empezar a trabajar en una obra un poco más coherente, que es en lo que estoy ahora. Y cuando la tenga saldré otra vez a la luz.
- ¿Y qué estás haciendo?
- Pues una obra que está muy cohesionada y coherente con lo que yo soy y lo que quiero hacer. Y estéticamente, me parece que es muy atrayente. Lo que estoy haciendo ahora es una mezcla entre escultura, dibujo y vídeo. Hago como unas especies de instalaciones escultóricas tridimensionales, que no son ni escultura, ni dibujo, ni vídeos, sino una amalgama de estas tres categorías.
- ¿Y esta obra se puede exponer en una sala?
- Sí, claro. Algunas tienen forma tridimensional y otras son más planimétricas.
- ¿Son de gran tamaño?
- Sí. Una de ellas tiene dos metros. Es una especie de mueble interactivo y con vídeo.
- ¿Dónde llevas a cabo estas obras?
- Estoy trabajando mucho en Sevilla, porque utilizo materiales que no puedo trabajar en mi estudio. Por ejemplo, estoy haciendo una obra en metraquilato que es bastante grande. Los vídeos los hago en el exterior y los dibujos, prácticamente en mi casa. Mi estudio es más ahora un espacio de reflexión, donde me voy a pensar un poco y a organizar el trabajo.
- ¿Cómo es tu proceso creativo?
- Es un poco complejo. Mi máster, que se titula 'Idea y producción', va un poco de eso, porque se centra en la producción en torno a un concepto. A lo largo de la carrera estás generando ejercicios de clase, que son un poco representativas, mientras que ahora más que representando lo que hago es presentar algo, y en torno a un concepto, porque a mí me han ofrecido un abanico de cosas, viendo a artistas y referentes, y que te llevan ya al final a una formalización plástica.

Alfonso San José es licenciado en Magisterio por inglés y recientemente ha concluido sus estudios en la Facultad de Bellas Artes de Sevilla, formación que completa en estos momentos con un máster en Idea y Producción. Este mismo centro universitario ya le otorgó el pasado año la Medalla de la Facultad de Bellas Artes por su sobresaliente expediente académico.
- ¿Siempre has sido buen estudiante?
- Digamos que se me han dado bien los estudios. Por Magisterio pasé un poco más de puntillas, pero ya en Bellas Artes ya se juntó todo: me gusta, se me da bien y le pones empeño.
- ¿Cuándo decidiste orientar tu vida hacia el estudio de las Bellas Artes?
- Se trata de algo que siempre lo he tenido ahí en el horizonte, lo que ocurre es que lo decidí ya en el momento en el que acabé Magisterio, que lo estudié un poco por tradición familiar.
- ¿Y cuáles eran las inquietudes que te llevaron a ello?
- El arte es el vehículo a través del cual yo me expreso, y sentía que Bellas Artes era el contexto. Para ser artista no hay que estudiar Bellas Artes, pero sí que hay un contexto, una serie de personas, artistas, alumnos, que se reúnen en la Facultad y se crea un ambiente especial.
- ¿Antes de matricularte en Bellas Artes habías realizado algunas obras por tu cuenta?
- Claro, lo hacía por libre, pero eran desperdigadas.
- ¿Qué tipo de cosas?
- Aquellas que me llamaban la atención. Las copiaba, las dibujaba y las representaba, pero, claro, es una etapa que se va quemando y llega el momento en el que necesitas de otras fuentes.
- ¿Y qué tienes pensado hacer una vez que concluya el máster?
- El doctorado. Es lo que tengo en el horizonte más cercano. Para ello, el trabajo de fin de máster me está sirviendo como semilla de lo que va a ser la futura tesis.
- ¿En qué has centrado el trabajo de fin de máster?
- Sobre la forma tridimensional. A mí me gusta mucho la escultura y el dibujo, y entonces estoy trabajando en cómo lo tridimensional, al fragmentarse, pierde unicidad, y eso me lleva, por ejemplo, a la frontera, que es una división muy artificial.
- Y una vez que concluya el doctorado, ¿te gustaría dedicarte a la enseñanza?
- Me gustaría, lo que ocurre es que cuando acabe el doctorado creo que voy a tener que volar, que será un punto de no retorno, porque en la Facultad de Bellas Artes hay muy pocas perspectivas.
- Volar, ¿a dónde?
- Creo que a Estados Unidos.
- ¿Crees que allí hay mayores posibilidades?
- Creo que sí. Y con mi formación, creo que también. Es que a mí me puede venir bien. En principio, podría irme con una beca de profesor de español y, una vez allí, indagar e ver el movimiento artístico que hay.
- ¿Qué irías a Nueva York?
- Prefiero alguna zona más hispana, como San Francisco o Miami.
- ¿No te da miedo irte de Dos Hermanas?
- Hombre, me da un poco de vértigo, porque a mí me gustaría desarrollarme aquí, la verdad, pero estoy viendo que se me está cerrando el campo.
- Durante este tiempo, ¿has tenido en Dos Hermanas algún tipo de contacto con alguna escuela, colectivo o corriente artística?
- No. Es que tampoco he visto aquí mucho movimiento. Está Ventana Plástica, pero vi que son más bien aficionados. Pero tampoco me he movido mucho en Sevilla, sino que estoy muy metido en la Facultad.
- ¿Has llegado a participar en la Muestra al Aire Libre que convoca Ventana Plástica?
- Sí, he participado en alguna ocasión, pero lo hice cuando estudiaba Magisterio. Me dieron algún premio, pero ya lo agoté un poco.
- ¿Tienes algún maestro o corriente artística que te atraiga especialmente o que te inspires en ella?
- Hay muchos artistas que me encantan, como, por ejemplo, Velázquez, pero yo no pinto; entonces, para mí es un referente y cojo muchas cosas de él y de otros artistas, porque nadie crea de la nada. Todo el mundo coge sus ingredientes y luego prepara su receta.
- ¿Has montado alguna vez una exposición o mostrado tu obra en algún lugar?
- Sí, he participado en algunas exposiciones, pero cuando llegué a tercero de carrera paré, porque lo que estaba haciendo era mostrar algunas obras desperdigadas, trabajos de clase... Entonces, paré, decidí apartarme y empezar a trabajar en una obra un poco más coherente, que es en lo que estoy ahora. Y cuando la tenga saldré otra vez a la luz.
- ¿Y qué estás haciendo?
- Pues una obra que está muy cohesionada y coherente con lo que yo soy y lo que quiero hacer. Y estéticamente, me parece que es muy atrayente. Lo que estoy haciendo ahora es una mezcla entre escultura, dibujo y vídeo. Hago como unas especies de instalaciones escultóricas tridimensionales, que no son ni escultura, ni dibujo, ni vídeos, sino una amalgama de estas tres categorías.
- ¿Y esta obra se puede exponer en una sala?
- Sí, claro. Algunas tienen forma tridimensional y otras son más planimétricas.
- ¿Son de gran tamaño?
- Sí. Una de ellas tiene dos metros. Es una especie de mueble interactivo y con vídeo.
- ¿Dónde llevas a cabo estas obras?
- Estoy trabajando mucho en Sevilla, porque utilizo materiales que no puedo trabajar en mi estudio. Por ejemplo, estoy haciendo una obra en metraquilato que es bastante grande. Los vídeos los hago en el exterior y los dibujos, prácticamente en mi casa. Mi estudio es más ahora un espacio de reflexión, donde me voy a pensar un poco y a organizar el trabajo.
- ¿Cómo es tu proceso creativo?
- Es un poco complejo. Mi máster, que se titula 'Idea y producción', va un poco de eso, porque se centra en la producción en torno a un concepto. A lo largo de la carrera estás generando ejercicios de clase, que son un poco representativas, mientras que ahora más que representando lo que hago es presentar algo, y en torno a un concepto, porque a mí me han ofrecido un abanico de cosas, viendo a artistas y referentes, y que te llevan ya al final a una formalización plástica.
FRANCISCO GIL CHAPARRO / REDACCIÓN