Si hay una persona que sin duda está viviendo esta Feria de 2015 de forma especial, ese es José Román Castro, delegado de Fiestas y Servicios del Ayuntamiento de Dos Hermanas, quien ha estado al frente de esta celebración desde hace 32 años y el máximo responsable de sus cambios más destacados: el traslado de su ubicación desde Los Montecillos al actual recinto de Vistazul (1986), y pasar la Feria de julio a mayo.
Pero, pese a ser su última Feria, a José Román no se le ha cambiado el chip en ningún instante. Estos días es frecuente verlo, en muchas ocasiones solo, paseando por el recinto ferial casi en actitud vigilante y con todos los sentidos puestos en procurar el mejor desarrollo posible de esta celebración que reúne cada día a miles de personas.
Sólo los reconocimientos públicos y privados que está recibiendo se salen un poco de la rutina de esta Feria de 2015, ya que de todos es sabido que tras las Elecciones Municipales del próximo 24 de mayo dejará la política activa y se dedicará a disfrutar de una merecida jubilación. El pasado jueves, el presidente de la Peña Sevillista de Dos Hermanas, Manuel Chamorro, le hizo entrega de una placa en reconocimiento a su labor en el Ayuntamiento durante estos años, y ni el propio interesado gusta de propagarlo.
Este Diario Digital habló con José Román en la madrugada de este domingo, día 10 de mayo, después de asistir a la entrega de los Premios de Exornos de Casetas, y pudo comprobar que sus contestaciones continúan siendo las de una persona que sigue asumiendo sus responsabilidades como si estuviera ahora empezando.
- Va a ser su última Feria como delegado de Fiestas. ¿Cómo la está viviendo?
- Como todos los años, preocupándome de que todo se desarrolle con la máxima normalidad posible.
- ¿Cuántos años al frente de la Feria?
- 32.
- ¿Y cómo ha evolucionado en todos estos años?
- Eso lo saben los nazarenos muy bien: de menos a más.
- ¿Cómo está resultando esta Feria?
- Bien, tranquila, más animada que otros años. Al principio con buena temperatura, y estos últimos días con calor, pero muy bien.
- ¿Está viviendo una Feria especial?
- Bueno, la verdad es que el tiempo no me deja pensar. Mi límite es acabar el 24 de mayo, y hasta entonces vivo todo como si fuera un año más.
- Pero al menos el próximo año seguro que la vivirá de otra forma.
- Por supuesto. El año que viene sí que será distinto.
Pero, pese a ser su última Feria, a José Román no se le ha cambiado el chip en ningún instante. Estos días es frecuente verlo, en muchas ocasiones solo, paseando por el recinto ferial casi en actitud vigilante y con todos los sentidos puestos en procurar el mejor desarrollo posible de esta celebración que reúne cada día a miles de personas.
Sólo los reconocimientos públicos y privados que está recibiendo se salen un poco de la rutina de esta Feria de 2015, ya que de todos es sabido que tras las Elecciones Municipales del próximo 24 de mayo dejará la política activa y se dedicará a disfrutar de una merecida jubilación. El pasado jueves, el presidente de la Peña Sevillista de Dos Hermanas, Manuel Chamorro, le hizo entrega de una placa en reconocimiento a su labor en el Ayuntamiento durante estos años, y ni el propio interesado gusta de propagarlo.
Este Diario Digital habló con José Román en la madrugada de este domingo, día 10 de mayo, después de asistir a la entrega de los Premios de Exornos de Casetas, y pudo comprobar que sus contestaciones continúan siendo las de una persona que sigue asumiendo sus responsabilidades como si estuviera ahora empezando.
- Va a ser su última Feria como delegado de Fiestas. ¿Cómo la está viviendo?
- Como todos los años, preocupándome de que todo se desarrolle con la máxima normalidad posible.
- ¿Cuántos años al frente de la Feria?
- 32.
- ¿Y cómo ha evolucionado en todos estos años?
- Eso lo saben los nazarenos muy bien: de menos a más.
- ¿Cómo está resultando esta Feria?
- Bien, tranquila, más animada que otros años. Al principio con buena temperatura, y estos últimos días con calor, pero muy bien.
- ¿Está viviendo una Feria especial?
- Bueno, la verdad es que el tiempo no me deja pensar. Mi límite es acabar el 24 de mayo, y hasta entonces vivo todo como si fuera un año más.
- Pero al menos el próximo año seguro que la vivirá de otra forma.
- Por supuesto. El año que viene sí que será distinto.
FRANCISCO GIL CHAPARRO / REDACCIÓN
