Los dos arcos del siglo XVIII que se encuentran anexos a la Torre del Olivar, en la calle Real Utrera, ya se pueden contemplar una vez que ha concluido el proceso de restauración al que han sido sometidos durante los últimos meses. De la misma forma, el andamiaje que tapaba la citada torre ya ha sido retirado tras quedar igualmente restaurado, siguiéndose aún con la adecuación de su espacio interior.
La vista que se puede contemplar ya desde la calle Real Utrera ofrece un panorama distinto al conocido hasta entonces, ya que poco a poco van avanzando las obras llevadas a cabo en el entorno de la Torre del Olivar y que configurarán una plaza nueva que llevará el nombre de Plaza del Paraíso.
Como se recordará, el Ayuntamiento procedió el pasado mes de agosto al derribo de los primeros números impares de la calle Real Utrera -los más próximos a la Parroquia de Santa María Magdalena-, y a partir de ahí se inició un proceso de reconversión de ese entorno, que incluía la restauración de la denominada Torre del Olivar y de los arcos anexos al mismo, datados en el siglo XVIII y que dieron entrada, en su momento, a la antigua Hacienda de La Mina Chica.
Durante este tiempo, técnicos expertos en restauración procedieron en primer lugar al afianzamiento de los arcos y al revestimiento y adecentamiento interior de la Torre. A partir de ahora se trabajará en colocar una estructura de vigas de acero que los unirá y, sobre ésta, una pérgola que hará que ambos elementos se integren en la nueva plaza pública que se creará en esta zona.
Ambos arcos conservan en su parte superior el friso con moldura de ladrillo en el que puede leerse la inscripción ANNO DOMINI MDCCLXXXI (AÑO DEL SEÑOR 1781), además de un pequeño azulejo con la imagen de la Virgen del Mayor Dolor, datado en el año 1780.
La vista que se puede contemplar ya desde la calle Real Utrera ofrece un panorama distinto al conocido hasta entonces, ya que poco a poco van avanzando las obras llevadas a cabo en el entorno de la Torre del Olivar y que configurarán una plaza nueva que llevará el nombre de Plaza del Paraíso.
Como se recordará, el Ayuntamiento procedió el pasado mes de agosto al derribo de los primeros números impares de la calle Real Utrera -los más próximos a la Parroquia de Santa María Magdalena-, y a partir de ahí se inició un proceso de reconversión de ese entorno, que incluía la restauración de la denominada Torre del Olivar y de los arcos anexos al mismo, datados en el siglo XVIII y que dieron entrada, en su momento, a la antigua Hacienda de La Mina Chica.
Durante este tiempo, técnicos expertos en restauración procedieron en primer lugar al afianzamiento de los arcos y al revestimiento y adecentamiento interior de la Torre. A partir de ahora se trabajará en colocar una estructura de vigas de acero que los unirá y, sobre ésta, una pérgola que hará que ambos elementos se integren en la nueva plaza pública que se creará en esta zona.
Ambos arcos conservan en su parte superior el friso con moldura de ladrillo en el que puede leerse la inscripción ANNO DOMINI MDCCLXXXI (AÑO DEL SEÑOR 1781), además de un pequeño azulejo con la imagen de la Virgen del Mayor Dolor, datado en el año 1780.
F. G. CH. / REDACCIÓN