El Cementerio de Dos Hermanas ha vivido sobre las 11:00 horas de este miércoles un emocionado y multitudinario entierro del pequeño Miguel V.P., de 6 años de edad, que falleció como consecuencia del incendio que se registró en la madrugada del martes en su casa, situada en la Plaza Seixa, en Los Montecillos. Mientras tanto, sus hermanos, una niña de 13 meses y un menor de 14 años, siguen ingresados en estado grave.
Cientos de personas han querido arropar en la mañana de este miércoles a la madre y familiares del pequeño Miguel, que falleció algo más de 24 horas antes mientras dormía en su habitación del piso situado en la tercera planta del bloque 2 de la Plaza Seixa. Y lo hicieron de forma multitudinaria y solidaria, en una ceremonia que se inició con un responso en el interior del Tanatorio Municipal y con el entierro que tuvo lugar sobre las 11:00 horas, y que transcurrió de forma muy rápida.
Eso sí, fueros inevitables los momentos de emoción, ya que tanto la abuela del pequeño, justo en el momento en el que su nieto iba a ser enterrado, como su madre, Eva Parra, tuvieron que ser atendidos tras sufrir sendos desmayos. En concreto, a esta última le sobrevino el desmayo cuando se encontraba en las puertas del Cementerio rodeada de familiares y amigos. En un momento determinado, se sintió mal y hubo de ser agarrada por dos personas, que la apoyaron junto al un árbol mientras era abanicada.
Personal de los Servicios Sociales del Ayuntamiento dieron aviso al servicio de emergencias 112, que acudieron de inmediato para subirla en una camilla y atenderla en el interior de una ambulancia. Instantes después, tras recuperarse, la madre comenzó a pedir que la llevaran al hospital para estar junto a sus hijos, que siguen ingresados en estado grave.
Los heridos, en estado grave
Los dos hermanos que resultaron heridos en el incendio continúan graves, con el más pequeño de ellos ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Infantil, y el mayor, de 14 años, en Rehabilitación y Traumatología del Virgen del Rocío, según el último parte médico facilitado.
El porcentaje de quemaduras del niño de 14 años es del 60%, según ha informado la Consejería de Salud en un comunicado, que añade que a este menor se le sometió a una intervención de urgencia nada más ingresar en el citado Hospital. En relación a la evolución del estado de ambos, desde este centro sanitario se ha indicado que se facilitará uno nuevo cuando los médicos detecten una variación importante en sus estados de salud.
Por otra parte, la Policía Científica continuaba en la mañana de este miércoles con la investigación del suceso que les lleve a averiguar la causa que originó el incendio, y que, según las primeras impresiones, todo apunta a que pudiera tratarse de un cortocircuito.
Cientos de personas han querido arropar en la mañana de este miércoles a la madre y familiares del pequeño Miguel, que falleció algo más de 24 horas antes mientras dormía en su habitación del piso situado en la tercera planta del bloque 2 de la Plaza Seixa. Y lo hicieron de forma multitudinaria y solidaria, en una ceremonia que se inició con un responso en el interior del Tanatorio Municipal y con el entierro que tuvo lugar sobre las 11:00 horas, y que transcurrió de forma muy rápida.
Eso sí, fueros inevitables los momentos de emoción, ya que tanto la abuela del pequeño, justo en el momento en el que su nieto iba a ser enterrado, como su madre, Eva Parra, tuvieron que ser atendidos tras sufrir sendos desmayos. En concreto, a esta última le sobrevino el desmayo cuando se encontraba en las puertas del Cementerio rodeada de familiares y amigos. En un momento determinado, se sintió mal y hubo de ser agarrada por dos personas, que la apoyaron junto al un árbol mientras era abanicada.
Personal de los Servicios Sociales del Ayuntamiento dieron aviso al servicio de emergencias 112, que acudieron de inmediato para subirla en una camilla y atenderla en el interior de una ambulancia. Instantes después, tras recuperarse, la madre comenzó a pedir que la llevaran al hospital para estar junto a sus hijos, que siguen ingresados en estado grave.
Los heridos, en estado grave
Los dos hermanos que resultaron heridos en el incendio continúan graves, con el más pequeño de ellos ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Infantil, y el mayor, de 14 años, en Rehabilitación y Traumatología del Virgen del Rocío, según el último parte médico facilitado.
El porcentaje de quemaduras del niño de 14 años es del 60%, según ha informado la Consejería de Salud en un comunicado, que añade que a este menor se le sometió a una intervención de urgencia nada más ingresar en el citado Hospital. En relación a la evolución del estado de ambos, desde este centro sanitario se ha indicado que se facilitará uno nuevo cuando los médicos detecten una variación importante en sus estados de salud.
Por otra parte, la Policía Científica continuaba en la mañana de este miércoles con la investigación del suceso que les lleve a averiguar la causa que originó el incendio, y que, según las primeras impresiones, todo apunta a que pudiera tratarse de un cortocircuito.
F. GIL / REDACCIÓN