La tranquilidad en la que viven los vecinos de la zona de Echaguy (Federico de Echaguy) se rompió de pronto la pasada semana; especialmente a raíz de que Endesa cortara la luz a un grupo de vecinos: hay quien habla de 40, hay quien dice que fueron más. Esta situación provocó que las familias afectadas salieran a la calle a protestar. Pero se trata de un conflicto que no se puede solucionar de la noche a la mañana.
El propio Ayuntamiento de Dos Hermanas, que desde que se conoció la situación que provocó el corte de luz y la protesta de los afectados ha estado muy pendiente de esta cuestión, ha descrito lo que ocurre en esta zona de forma muy gráfica, y siempre aclarando que no se trata de un problema que se solucione con un simple trámite, sino de algo más complejo y que llevará, se quiera o no, mucho tiempo. Para empezar, porque la situación en la que se encuentran las -más o menos- setecientas viviendas que se encuentran en esta zona que ocupa un tramo de la carretera vieja que une Dos Hermanas con Montequinto, está pendiente de un PERI (Plan Especial de Reforma Interior); algo para nada baladí.
¿Y por qué Endesa les cortó la luz a algunos de los vecinos que viven en esta zona? Según explicó recientemente el portavoz del Gobierno municipal, Agustín Morón, urbanísticamente hay dos tipos de IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles): el que corresponde a aquel suelo que está consolidado (los que cuentan con alcantarillado, redes de saneamiento, tomas de agua potable, de luz, etcétera), y al que no lo está, al carecer de todas estas infraestructuras. Lo que quiere decir que encontrarse en un terreno urbano no significa necesariamente que éste se encuentre regularizado.
En Echaguy, lo mismo que en otras barriadas de Dos Hermanas, se da la circunstancia de que hay muchas parcelas calificadas como rústicas, pero que, al fin y al cabo, tienen una vivienda urbana en su interior, de ahí que el Gobierno central, que es quien realiza la valoración catastral, cobre un dinero por este espacio habitado.
En el PGOU (Plan General de Ordenación Urbana) de Dos Hermanas de 2006 -que es el vigente-, a esta zona de Echaguy se la consideró como urbana, sólo que la legislación general ha ido cambiando desde entonces, de forma que han llegado a crearse situaciones distintas.
Así las cosas, y en relación con el corte de suministro que se produjo la pasada semana, lo que ocurrió -siempre según el Ayuntamiento nazareno- es que el Departamento de Fraude de Endesa, que actúa en toda Andalucía, decidió actuar en esta zona nazarena, pese a que es uno de los espacios de viviendas que lleva ya un tiempo trabajando en la regularización de sus viviendas. Y Endesa actuó pidiendo incluso el auxilio de la Policía Nacional, algo que, según informó el portavoz del Gobierno socialista, realizó -según esta empresa- por motivos de seguridad.
Pleno proceso de regularización urbanística
La versión municipal es que Echaguy está en pleno proceso de regularización urbanística y que tiene un PERI provisional, aunque, dada la amplitud del terreno sobre la que se levanta y su complejidad, se encuentra finalmente dividida en dos unidades de ejecución: una que ya tiene constituida su Junta de Compensación, con sus correspondientes bases y estatutos, y otra que de momento sólo tiene la documentación presentada.
Pero, claro, un PERI no es cuestión de poco tiempo, ya que son muchos los trámites que hay que hacer, especialmente cuando son los propios vecinos los que presentan alegaciones -aquí, recordemos, hay unas 700 parcelas-, lo que, lógicamente, ralentiza aún más todo. Pero es que, de por sí, un PERI es lento, para empezar porque, a diferencia de una zona sin urbanizar -donde se puede planificar todo sin problema-, otro espacio donde ya hay casas y parcelas, resulta mucho más complejo determinar por dónde tiene que ir un colector o desde dónde hasta dónde tiene que transcurrir una vía urbana. Y, en ello, no sólo entra en liza un Ayuntamiento, sino la Junta, el Estado y hasta las distintas compañías suministradoras.
Por tanto, en la zona de Echaguy lo primero que hay que hacer es un PERI, el proyecto de urbanización de la zona, para que, cuando esté ya concluido -pueden pasar años-, se pueda estar ya todo regularizado.
Nada más conocerse este suceso, la delegada de Ordenación del Territorio del Ayuntamiento de Dos Hermanas, Ana Conde, mantuvo una reunión con Endesa, con el fin de buscar una solución a la situación que provocó el corte de luz, y de la que salió el compromiso de intentar aplicar una norma que permitiera que las viviendas se pudieran acoger a la situación de AFO (Asimilado Fuera de Ordenación), para que, al menos, pudieran contar con los correspondientes boletines que les permitieran contratar suministros.
Pero el AFO se da a las viviendas, no a la zona, de forma que todas estas casas -de forma individual- deberán reunir los requisitos mínimos para conseguir sus boletines de enganche y demás certificados. Será, por tanto, Endesa la que dirá qué viabilidad tiene que tener cada una para recibir esa prestación de contrato en relación a la infraestructura con la que cuenta la vivienda; algo que ya conocen los propios vecinos.
Al menos de momento, las casas afectadas volvieron a recuperar el suministro eléctrico. Pero, claro, en el término de Dos Hermanas hay otras muchas zonas que cuentan con una situación similar, en unos casos con vecinos que trabajan para regularizar su situación, y, en otras, con vecinos que no están haciendo nada, lo que quiere decir que se encuentran en situación de fraude. Por tanto, ¿les podrá ocurrir lo mismo que a las parcelas de Echaguy? Y, lo que es peor, ¿se encontrarán en la misma situación para poder afrontar su regularización?
El propio Ayuntamiento de Dos Hermanas, que desde que se conoció la situación que provocó el corte de luz y la protesta de los afectados ha estado muy pendiente de esta cuestión, ha descrito lo que ocurre en esta zona de forma muy gráfica, y siempre aclarando que no se trata de un problema que se solucione con un simple trámite, sino de algo más complejo y que llevará, se quiera o no, mucho tiempo. Para empezar, porque la situación en la que se encuentran las -más o menos- setecientas viviendas que se encuentran en esta zona que ocupa un tramo de la carretera vieja que une Dos Hermanas con Montequinto, está pendiente de un PERI (Plan Especial de Reforma Interior); algo para nada baladí.
¿Y por qué Endesa les cortó la luz a algunos de los vecinos que viven en esta zona? Según explicó recientemente el portavoz del Gobierno municipal, Agustín Morón, urbanísticamente hay dos tipos de IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles): el que corresponde a aquel suelo que está consolidado (los que cuentan con alcantarillado, redes de saneamiento, tomas de agua potable, de luz, etcétera), y al que no lo está, al carecer de todas estas infraestructuras. Lo que quiere decir que encontrarse en un terreno urbano no significa necesariamente que éste se encuentre regularizado.
En Echaguy, lo mismo que en otras barriadas de Dos Hermanas, se da la circunstancia de que hay muchas parcelas calificadas como rústicas, pero que, al fin y al cabo, tienen una vivienda urbana en su interior, de ahí que el Gobierno central, que es quien realiza la valoración catastral, cobre un dinero por este espacio habitado.
En el PGOU (Plan General de Ordenación Urbana) de Dos Hermanas de 2006 -que es el vigente-, a esta zona de Echaguy se la consideró como urbana, sólo que la legislación general ha ido cambiando desde entonces, de forma que han llegado a crearse situaciones distintas.
Así las cosas, y en relación con el corte de suministro que se produjo la pasada semana, lo que ocurrió -siempre según el Ayuntamiento nazareno- es que el Departamento de Fraude de Endesa, que actúa en toda Andalucía, decidió actuar en esta zona nazarena, pese a que es uno de los espacios de viviendas que lleva ya un tiempo trabajando en la regularización de sus viviendas. Y Endesa actuó pidiendo incluso el auxilio de la Policía Nacional, algo que, según informó el portavoz del Gobierno socialista, realizó -según esta empresa- por motivos de seguridad.
Pleno proceso de regularización urbanística
La versión municipal es que Echaguy está en pleno proceso de regularización urbanística y que tiene un PERI provisional, aunque, dada la amplitud del terreno sobre la que se levanta y su complejidad, se encuentra finalmente dividida en dos unidades de ejecución: una que ya tiene constituida su Junta de Compensación, con sus correspondientes bases y estatutos, y otra que de momento sólo tiene la documentación presentada.
Pero, claro, un PERI no es cuestión de poco tiempo, ya que son muchos los trámites que hay que hacer, especialmente cuando son los propios vecinos los que presentan alegaciones -aquí, recordemos, hay unas 700 parcelas-, lo que, lógicamente, ralentiza aún más todo. Pero es que, de por sí, un PERI es lento, para empezar porque, a diferencia de una zona sin urbanizar -donde se puede planificar todo sin problema-, otro espacio donde ya hay casas y parcelas, resulta mucho más complejo determinar por dónde tiene que ir un colector o desde dónde hasta dónde tiene que transcurrir una vía urbana. Y, en ello, no sólo entra en liza un Ayuntamiento, sino la Junta, el Estado y hasta las distintas compañías suministradoras.
Por tanto, en la zona de Echaguy lo primero que hay que hacer es un PERI, el proyecto de urbanización de la zona, para que, cuando esté ya concluido -pueden pasar años-, se pueda estar ya todo regularizado.
Nada más conocerse este suceso, la delegada de Ordenación del Territorio del Ayuntamiento de Dos Hermanas, Ana Conde, mantuvo una reunión con Endesa, con el fin de buscar una solución a la situación que provocó el corte de luz, y de la que salió el compromiso de intentar aplicar una norma que permitiera que las viviendas se pudieran acoger a la situación de AFO (Asimilado Fuera de Ordenación), para que, al menos, pudieran contar con los correspondientes boletines que les permitieran contratar suministros.
Pero el AFO se da a las viviendas, no a la zona, de forma que todas estas casas -de forma individual- deberán reunir los requisitos mínimos para conseguir sus boletines de enganche y demás certificados. Será, por tanto, Endesa la que dirá qué viabilidad tiene que tener cada una para recibir esa prestación de contrato en relación a la infraestructura con la que cuenta la vivienda; algo que ya conocen los propios vecinos.
Al menos de momento, las casas afectadas volvieron a recuperar el suministro eléctrico. Pero, claro, en el término de Dos Hermanas hay otras muchas zonas que cuentan con una situación similar, en unos casos con vecinos que trabajan para regularizar su situación, y, en otras, con vecinos que no están haciendo nada, lo que quiere decir que se encuentran en situación de fraude. Por tanto, ¿les podrá ocurrir lo mismo que a las parcelas de Echaguy? Y, lo que es peor, ¿se encontrarán en la misma situación para poder afrontar su regularización?
FRANCISCO GIL CHAPARRO / REDACCIÓN
