Dos Hermanas Diario Digital se hace eco en su Buzón del Lector del artículo remitido por la Agrupación Local del PCA de Dos Hermanas en el que se hace eco de la celebración, el día 3 de diciembre, del Día de las Personas con Discapacidad. Si lo desea, puede escribir a doshermanasdiariodigital@gmail.com exponiendo su queja, comentario o sugerencia, e incluso acompañarla también de alguna fotografía.
Inútiles, tarados, mongolitos, inválidos, minusválidos, discapacitados… Parece que el lenguaje no discriminatorio ha tardado en llegar al ámbito de la diversidad funcional. Vaya palabreja, ¿no? En realidad no es más que una forma positiva de llamar a las personas con capacidades y funcionalidades diferentes. De hecho, todos los seres humanos tenemos capacidades diferentes y no por ello se nos estigmatiza. ¿No sería más optimista para los fumadores poner en las cajetillas "dejar de fumar alarga tu vida", que 'fumar mata'? Depende del cariz con el que se enmarque el mensaje, provocaremos un cambio en la forma de abordar algunos temas.
El 3 de diciembre se celebró el Día de las Personas con Discapacidad. La campaña de FEAPS para este año reza 'Somos superpersonas', y no van mal encaminados. Son superpersonas porque tienen que superar las barreras que esta sociedad les impone día a día, tanto físicas como culturales, aunque ambas van de la mano. ¿Hay necesidad de colocar escalones en todos los edificios públicos? ¿Tanto cuesta colocar una puerta veinte centímetros más ancha para que entre una silla de ruedas? ¿Es necesario que el lenguaje que utilizan los documentos burocráticos sea incomprensible? Y una lista muy larga de barreras que nos podría ocupar un quijote y medio.
Y aparte de esta crisis de valores que siempre hemos arrastrado, sumemos la estafa económica en la que estamos inmersos. Recortes en autonomía personal y atención a la dependencia; recortes en centros de día y centros especiales de empleo; impagos por parte de las administraciones…Todo esto nos hace volver a los antiguos modelos que trataban la discapacidad como si fuese una enfermedad y había que curarla para que se adaptasen a la homogeneidad de la sociedad. No se quiere al distinto, se quieren clones que ejerzan procesos mecánicos de trabajar para consumir, y para ello trabajar más porque hay que consumir más.
Entonces dime…si paternalizamos e infantilizamos a estas personas, llamándoles 'niños' y haciendo que vivan siempre de subsidios; si no promovemos una inclusión e integración social real, y nuestra actuación se basa en no subsanar y poner cada día más barreras. ¿Quiénes son los discapacitados: las personas o la sociedad.
Inútiles, tarados, mongolitos, inválidos, minusválidos, discapacitados… Parece que el lenguaje no discriminatorio ha tardado en llegar al ámbito de la diversidad funcional. Vaya palabreja, ¿no? En realidad no es más que una forma positiva de llamar a las personas con capacidades y funcionalidades diferentes. De hecho, todos los seres humanos tenemos capacidades diferentes y no por ello se nos estigmatiza. ¿No sería más optimista para los fumadores poner en las cajetillas "dejar de fumar alarga tu vida", que 'fumar mata'? Depende del cariz con el que se enmarque el mensaje, provocaremos un cambio en la forma de abordar algunos temas.
El 3 de diciembre se celebró el Día de las Personas con Discapacidad. La campaña de FEAPS para este año reza 'Somos superpersonas', y no van mal encaminados. Son superpersonas porque tienen que superar las barreras que esta sociedad les impone día a día, tanto físicas como culturales, aunque ambas van de la mano. ¿Hay necesidad de colocar escalones en todos los edificios públicos? ¿Tanto cuesta colocar una puerta veinte centímetros más ancha para que entre una silla de ruedas? ¿Es necesario que el lenguaje que utilizan los documentos burocráticos sea incomprensible? Y una lista muy larga de barreras que nos podría ocupar un quijote y medio.
Y aparte de esta crisis de valores que siempre hemos arrastrado, sumemos la estafa económica en la que estamos inmersos. Recortes en autonomía personal y atención a la dependencia; recortes en centros de día y centros especiales de empleo; impagos por parte de las administraciones…Todo esto nos hace volver a los antiguos modelos que trataban la discapacidad como si fuese una enfermedad y había que curarla para que se adaptasen a la homogeneidad de la sociedad. No se quiere al distinto, se quieren clones que ejerzan procesos mecánicos de trabajar para consumir, y para ello trabajar más porque hay que consumir más.
Entonces dime…si paternalizamos e infantilizamos a estas personas, llamándoles 'niños' y haciendo que vivan siempre de subsidios; si no promovemos una inclusión e integración social real, y nuestra actuación se basa en no subsanar y poner cada día más barreras. ¿Quiénes son los discapacitados: las personas o la sociedad.
Agrupación Local del PCA de Dos Hermanas / REDACCIÓN